Elecciones Estados Unidos
Los estadounidenses acudirán a las urnas para elegir al próximo presidente el próximo 5 de noviembre. Conoce las fechas y días clave de este proceso.
Los estadounidenses se preparan para elegir al próximo presidente el 5 de noviembre de 2024, unas elecciones que determinarán quién ocupará la Casa Blanca durante los próximos cuatro años. Este proceso electoral, que sigue un calendario casi invariable desde la independencia del país, culminará con la toma de posesión el 20 de enero de 2025 en las escalinatas del Congreso.
El 5 de noviembre, alrededor de 240 millones de ciudadanos podrán ejercer su derecho al voto. Además de la elección presidencial, se renovará completamente la Cámara de Representantes y se elegirán un tercio de los senadores.
Los votantes no están obligados a esperar hasta el día de las elecciones para emitir su sufragio. En los últimos ciclos electorales, el voto por correo ha cobrado gran relevancia, permitiendo que más de 65 millones de estadounidenses optaran por esta modalidad en 2020. Este año, se espera que el voto anticipado y el por correo continúen siendo herramientas importantes para facilitar la participación electoral, especialmente en un contexto donde las preocupaciones sobre la accesibilidad y la seguridad del voto son cada vez más prominentes.
La elección en noviembre no es casualidad; se lleva a cabo el primer martes después del primer lunes de este mes en los años bisiestos. Esta fecha fue seleccionada para facilitar el transporte y evitar los rigores del invierno, asegurando que no coincida con el festivo del 1 de noviembre.
Un aspecto fundamental del sistema electoral estadounidense es el Colegio Electoral, que consiste en 538 electores que representan a cada estado en la elección presidencial. El 5 de noviembre, los ciudadanos votan para elegir a estos electores, quienes serán responsables de designar al próximo presidente. Para ganar la presidencia, un candidato debe obtener al menos 270 votos electorales.
La reunión del Colegio Electoral se llevará a cabo el 17 de diciembre de 2024, momento en el cual los electores formalizarán sus votos. Este sistema puede parecer confuso, ya que no siempre refleja el voto popular. En 2016, por ejemplo, Donald Trump fue elegido presidente a pesar de perder el voto popular ante Hillary Clinton. Esto subraya la singularidad del sistema electoral estadounidense y la importancia de cada voto a nivel estatal.
El 6 de enero de 2025, el Congreso se reunirá para contar y certificar los votos electorales en una sesión encabezada por la vicepresidenta, Kamala Harris, en su calidad de presidenta del Senado. Este evento es simbólicamente importante, ya que en 2021 se convirtió en el escenario de un asalto al Capitolio, lo que añade una capa de tensión al proceso.
Finalmente, el 20 de enero de 2025, el ganador de las elecciones será investido como el 47º presidente de Estados Unidos. La ceremonia de toma de posesión se llevará a cabo frente al Congreso, donde el nuevo presidente realizará el juramento ante el presidente del Tribunal Supremo.
Con estas fechas clave en el horizonte, el país se prepara para un año electoral que promete ser decisivo en la historia política de Estados Unidos.
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