VIAJES
La aerolínea Air Canada pidió a dos pasajeros desconocidos que compartieran una habitación de hotel con una sola cama después de que perdieran sus vuelos. La compañía pretendía que una mujer de 71 años durmiera en la cama de una habitación y que en el sofá durmiera un hombre, a pesar de que no se conocían.
La hija de la mujer insistió a su madre para que no aceptara y se puso en contacto con la aerolínea. Finalmente, consiguió encontrar una habitación en otro hotel. A cambio, la aerolínea le ofreció un asiento con más espacio en su vuelo al día siguiente y 20 dólares y cupones de alimentos, pero la hija exige una disculpa formal.