DIEZ AÑOS SIN MARTA
“El Cuco” fue condenado por encubrimiento. Entonces era un adolescente de 15 años y ayudó a Miguel Carcaño a deshacerse del cuerpo de Marta del Castillo. Después de cumplir una pena de casi tres años internado en centros de menores, salió en libertad. Pero “El Cuco” no soportó la presión social y mediática que se encontró en Sevilla.
Hoy tiene 25 años y hemos localizado a Francisco Javier García en Rognac, un pueblo de la Provenza, al sur de Francia. Allí se trasladó con su pareja hace tres años buscando el anonimato. Ha intentado ser modelo fotográfico, hizo cursos de tatuador y consigue trabajos esporádicos a través de las empresas de trabajo temporal. Vive en un bajo y apenas se relaciona con los vecinos.
Ha mantenido su relación con Samuel Benítez, otro de los acusados. Samuel salió absuelto en el juicio pero también quería rehacer su vida lejos de Sevilla, y ha elegido Berre L´Etang, a muy pocos kilómetros de Rognac, el pueblo donde vive su amigo. Samuel ha intentado ser escultor; ha llegado a exponer su obra artística en el centro cultural de Rognac. Cuando la noticia de la exposición llego a Sevilla, las redes sociales reaccionaron enviando cientos de mensajes al Ayuntamiento de Rognac intentado boicotear el acto. Uno de los fotógrafos se retiró de la Exposición y pidió disculpas a la ciudad de Sevilla.
Vive con su pareja, una joven francesa con la que ha tenido un hijo.