Juicio al 'procés'
El mayor de los Mossos d'Esquadra Josep Lluis Trapero ha asegurado, al inicio de su interrogatorio en el juicio por rebelión en la Audiencia Nacional, que su relación personal con el entonces presidente de la Generalitat Carles Puigdemont no era "estrecha", ni "buena ni mala". Trapero, para quien la Fiscalía pide 11 años de cárcel por rebelión por su papel en el "procés", ha alegado que cuando el entonces director de los Mossos d'Esquadra Albert Batlle inició el proceso para nombrarle mayor, cargo al que accedió en abril de 2017, Puigdemont no lo sabía. Trapero, se desmarcó de la estrategia independentista de Puigdemont en su testifical en el juicio a la cúpula del "procés" en el Tribunal Supremo. Pese a que fue célebre la paella en Cadaqués (Girona) que compartieron Trapero y Puigdemont con un grupo de amigos comunes en agosto de 2016 -por la que el fiscal no le ha preguntado-, Trapero ha negado haber tenido "ningún tipo de relación estrecha" en el ámbito personal con el entonces presidente. Ha sostenido además que Puigdemont no tuvo nada que ver con su ascenso a mayor, cargo que llevaba casi una década vacante y para el que fue promocionado y que ocupó en abril de 2017, medio año antes del referéndum ilegal del 1-O.
Puigdemont no sabía de su nombramiento
Según Trapero, Puigdemont "ni lo sabía" cuando el entonces director de los Mossos Albert Batlle -que ha sido citado como testigo en el juicio- planteó en enero de 2016 la necesidad de recuperar la figura del mayor para "dignificar" el cargo del máximo mando de la policía autonómica. Batlle lo comentó entones con el exconseller de Interior Jordi Jané, sin que Puigdemont tuviera nada que ver con su ascenso, según Trapero, que desde 2014 ejercía como comisario jefe de los Mossos d'Esquadra, tras ser nombrado para el cargo en la etapa del conseller Ramon Espadaler, de la extinta Unió Democràtica de Cataluña y actualmente diputado en el Parlament por el PSC-Units per Avançar. Tanto Jané como Batlle, que en pleno debate sobre el papel de los Mossos en el "procés" siempre defendieron que la obligación de la policía autonómica era cumplir y hacer cumplir la ley, dejaron sus cargos dos meses antes del 1-O, al no compartir el rumbo que había tomado el gobierno catalán de cara al referéndum ilegal. En sustitución de Jané, ocupó el cargo de conseller de Interior Joaquim Forn, actualmente cumpliendo en prisión la condena de diez años y medio que le impuso el Tribunal Supremo por su papel en el "procés", mientras que el sustituto de Batlle como director de los Mossos fue Pere Soler, que se sienta junto a Trapero en el banquillo de los acusados de la Audiencia Nacional, también con una petición fiscal de 11 años de cárcel por rebelión. Trapero ha indicado que no sabía por qué los Mossos estuvieron casi una década sin mayor, pero ha precisado que entiende y comparte la tesis de Batlle de que se debía "dignificar" al máximo la función del comisario jefe para darle "autoridad" en el cuerpo. Por este motivo, ha descartado que existiese alguna "necesidad excepcional" que justificara su nombramiento, como le ha preguntado el fiscal, ya que "lo irregular" era que el cuerpo no hubiese tenido mayor durante tanto tiempo, lo que le "cuesta entender".
Jordi Sánchez no daba órdenes
Sobre si siguió indicaciones del condenado líder, entonces, de la Asamblea Nacional Catalana, Jordi Sànchez, durante la concentración en la Consejería de Economía contra el registro que realizaba una comisión judicial auxiliada por la Guardia Civil, Trapero ha respondido: "El señor Sánchez no impuso ni esa ni ninguna otra condición, no es nadie para imponer condiciones, no se le hubiese admitido ni a él ni a nadie, una persona que lleva una concentración no pone condiciones a la policía, no puedo responder otra cosa". Según el mando de los mossos, si no actuaron antes y con mayor eficacia ante el acoso de los manifestantes fue por falta de medios.
La Fiscalía rebajará la acusación
La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha anunciado que mantendrá hasta el final del juicio la acusación por el delito de rebelión contra el mayor de los Mossos d'Esquadra José Luis Trapero por el proceso independentista en Catalunya. Así lo ha comunicado el fiscal Miguel Angel Carballo en la primera sesión del juicio. "La Fiscalía es consciente de la sentencia dictada por el Tribunal Supremo y en el momento oportuno se considerará la conveniencia de cambiar la tipificación, pero este no es el momento procesal oportuno. No es legalmente precedente", ha dicho Carballo en respuesta a las cuestiones previas planteada por las defensas.