EN EL ANIVERSARIO DEL 1-0
El presidente catalán, Quim Torra, ha participado en un acto de conmemoración del 1-O en la localidad gerundense de Sant Julià de Ramis, donde se ha dirigido a los miembros de los CDR presentes para decirles que "hacen bien presionando" y les ha instado a que lo sigan haciendo.
Acompañado de los consellers del Govern, donde hace un año se registró la primera intervención policial del 1-O, Torra ha apelado a mantener el "espíritu" de aquel día, mientras los asistentes coreaban el lema: "el pueblo manda, el gobierno obedece".
A Joaquim Torra le ha respondido el ministro de Asuntos Exteriores, el también catalán Josep Borrell, diciendo que el gobierno tratará de seguir bajando la tensión y facilitando el diálogo, exigiendo que cada uno cumpla con su responsabilidad".
Mientras grupos de los CDR cortaban las vías del AVE en la estación de Girona y calles céntricas de Barcelona, el presidente catalán ha subido a un escenario instalado en la plaza donde se ubica el pabellón que ejerció de centro de votación del referéndum del 1-O ante una pancarta en la que también instaba al gobierno de la Generalitat a "obedecer al pueblo".
Quim Torra ha agradecido inicialmente al Govern de hace un año que hiciese "posible aquel referéndum de autodeterminación", y ha tenido un recuerdo para "los que no están en primera fila y deberían estar", en referencia a los exconseller encarcelados y a los huidos al extranjero.
Torra ha considerado que el 1-O fue la "semilla constituyente de la República Catalana" y ha insistido en la necesidad de recuperar "aquel espíritu" para encarar los "retos" de las próximas semanas. Para el presidente de la Generalitat, la "fraternidad" que presidió los sucesos de hace un año es necesaria en el momento actual, y ha citado unas palabras del músico Pau Casals que ha resumido en la frase: "no tengáis miedo de ser libres". "O libertad o libertad", ha manifestado Quim Torra, quien ha vuelto a recordar a los presos soberanistas para indicar que "no se está juzgando a unos cuantos políticos, sino al pueblo de Cataluña".
El presidente del Parlament, Roger Torrent, ha estado también en este acto en Sant Julià de Ramis y ha apelado insistentemente a la "fraternidad" que, a su entender, se vivió el 1-O. Según Torrent, cuyo domicilio se encuentra a tan sólo cinco minutos de la plaza donde ha tenido lugar esta conmemoración, el referéndum prohibido por el Tribunal Constitucional fue el "acto de soberanía más determinante".
"El 1-O, sobre todo, es futuro, no sólo memoria de dignidad, si no recorrido de futuro", ha afirmado Torrent, antes de añadir que, desde aquel día, "nada será igual".
Tras celebrar una reunión extraordinaria en Sant Julià de Ramis (Girona), Torra ha pronunciado un discurso institucional en el que ha expresado su compromiso con "el mandato democrático del 1-O" y, en una situación de "gravedad absoluta", ha manifestado su "apoyo absoluto" a los que considera "represaliados" por el Estado, entre ellos los presos soberanistas.
El presidente catalán ha añadido que "es un camino que mantendremos siempre, por respecto a los hechos ocurridos hace un año, por voluntad de servicio a la ciudadanía y porque la democracia y la libertad serán siempre la bandera de Cataluña".
En el primer aniversario del 1-O, Torra ha subrayado que "un año después vivimos una situación de gravedad absoluta" y ha remarcado que pronto el presidente de Òmnium, Jordi Cuixart, y el exlíder de la ANC Jordi Sànchez cumplirán un año de una prisión preventiva que ha calificado como "una especie de condena sin juicio ni garantías".
Asimismo, ha recordado que "casi todos los miembros" del gobierno del expresidente catalán Carles Puigdemont están "en la cárcel o en el exilio como consecuencia de aquel día de estallido democrático", en referencia al 1-O. En este contexto, ha exigido la puesta en libertad de "los presos políticos, el retorno de los exiliados y el levantamiento de la causa general contra el independentismo y la libertad de expresión".