Cataluña
El candidato de ERC a la presidencia de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonés, se ha sometido este viernes a la primera votación de su investidura en el pleno del Parlament, en la que no ha sido elegido porque Jxcat ha decidido abstenerse.
Aragonés necesitaba en primera votación la mayoría absoluta, que no tenía garantizada y todo apuntaba a que no la conseguiría, ya que solo había podido atar el voto a favor de los 9 diputados de la CUP, además de los 33 de ERC, sin poder convencer de momento a los 32 de JxCat para que le ofrezcan también su apoyo.
Al fracasar la primera votación, Aragonés dispondrá de una segunda oportunidad -previsiblemente el próximo martes, dos días hábiles después- en la que le bastará la mayoría simple, aunque igualmente necesitará los votos a favor de JxCat para ser investido.
En caso de que Aragonés tampoco lograse ser investido en segunda votación, se abriría un periodo de dos meses -a contar desde este viernes- para intentar de nuevo una investidura y, si no fuese posible, el 26 de mayo serían convocadas automáticamente nuevas elecciones para al cabo de 54 días, ya en julio.
El debate de este viernes ha comenzado a las 10:00 horas y se ha celebrado, como la sesión constitutiva del Parlament del pasado 12 de marzo, en el Auditorio de la cámara catalana, más espacioso y ventilado para poder acoger a los 135 diputados.
La sesión ha comenzado con la intervención, sin límite de tiempo, del candidato a la investidura, para exponer su programa de gobierno y, a continuación, ha sido el turno de los líderes parlamentarios, de mayor a menor, que han dispuesto de 30 minutos.
Tras la réplica de Aragonés y la contrarréplica de los grupos parlamentarios, se ha procedido a la votación, en la que los diputados han sido llamados uno a uno a pronunciar desde su escaño cuál es su voto: sí, no o abstención.