EN EL CONGRESO DE LOS DIPUTADOS
El fiscal general del Estado, José Manuel Maza, ha destacado este miércoles en el Congreso de los Diputados que estudiar las causas abiertas contra aforados no sólo forma parte de las prerrogativas de su cargo sino que constituye una "obligación" que introdujo su antecesor en el cargo en la etapa socialista, Cándido Conde Pumpido.
En una comparecencia ante la Comisión de Justicia de la Cámara en la que no se ha referido de forma concreta a la polémica suscitada por el papel de la Fiscalía en el caso que afecta al presidente del Gobierno murciano, el 'popular' Pedro Antonio Sánchez, Maza ha recordado que fue Pumpido quien introdujo esta instrucción a través de una circular.
"El fiscal general puede dar una orden para no ejercitar la acción penal, renunciar a esto es una dejación de funciones", ha destacado a la vez que ha puesto de manifiesto que no es el propio fiscal general quien analiza los casos concretos sino su secretaría técnica que propone la actuación a seguir. Ha insistido en que esta función aparejada al cargo debe ejercerse en aras de la transparencia y seguridad jurídica.
Durante una intervención técnica, en la que descrito punto por punto el Estatuto Fiscal, también ha recordado que los fiscales encargados de cada causa cuentan con mecanismos para oponerse al criterio de su superior. "La imparcialidad y la legalidad son las dos caras de una misma moneda acuñada para ejercitar la absoluta integridad encomendada", ha destacado.