ASÍ CONSTA EN EL SUMARIO
El exdirector del Instituto de Derecho Público de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid Enrique Álvarez Conde realizó transferencias de dinero "no justificadas" de la cuenta del instituto a familiares directos, entre ellos sus hijos y su yerno. Así consta en el sumario del caso que instruye la juez de Instrucción número 51 de Madrid, al que tuvo acceso Europa Press, en el que hay varias piezas separadas.
La Justicia investiga a Álvarez Conde por el asunto de las presuntas irregularidades destapadas en el falso máster que realizó en 2012 la expresidenta de la Comunidad de Madrid Cristina Cifuentes. La juez Carmen Rodríguez Medel le investiga por delitos de prevaricación y falsedad documental, considerándole 'el urdidor' del sistema montado en el instituto para dar trato de favor a "un grupo escogido" de alumnos, entre ellos también el presidente del PP, Pablo Casado.
En las tres ocasiones que ha acudido a prestar declaración se ha acogido a su derecho a no declarar. En un informe policial aportado a la causa, la Policía concluye que es "llamativo que personas de las que no consta en la URJC que tengan vinculación con el Instituto de Derecho Público, reciban transferencias de dinero de las cuentas de dicho Instituto, no constando en ninguna de ellas ningún tipo de concepto justificativo de la misma".
La información sale a raíz de la declaración en sede policial del delegado del rector, quien detectó anomalías en los movimientos de la cuenta del instituto cuando el 4 de mayo de 2018 acude a la sucursal bancaria de la cuenta para hacerse cargo de la misma.
Entonces el director le informa de "la gran cantidad de movimientos, especialmente desde 2017", así como "muchos gastos efectuados con la tarjeta de crédito". En concreto, le habla de una transferencia de 100.000 euros a un banco italiano en el que el instituto tiene abiertas dos cuentas corrientes.
Tras quedar "alarmado" por esta información, el delegado pone todo ello a conocimiento del rector de la universidad, Javier Ramos. Ante estos hechos, pusieron una denuncia ante los juzgados de plaza de Castilla.