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"Diplomacia de precisión" y "partido de la guerra", las fórmulas de Podemos para mostrar su malestar por el envío de armas a Ucrania

La invasión rusa y el apoyo militar ofensivo de España a Ucrania divide a Unidas Podemos.

La situación en Ucrania ha provocado diferencias en el PSOE y Unidas Podemos. Las ministras de la formación morada, Irene Montero e Ione Belarra están en contra del envío de armas, la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, a favor, Izquierda Unida no se opone y el sector catalán de Podemos se aleja de la dirección central del partido.

La guerra entre Rusia y Ucrania divide a Podemos

Hace varios días el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció que España iba a entregar armas y material militar ofensivo a Ucrania para hacer frente a las tropas rusas. Sin embargo, este anuncio no gustó a los ministros de Podemos que dejaron claro que no era la medida "más eficaz para que el conflicto acabe cuanto antes".

Belarra insistió entonces en que la "única forma efectiva y real" de parar el conflicto y ayudar al pueblo ucraniano, era "defender la diplomacia de precisión" y mostró su rechazo por "los partidos de la guerra".

Los comunes y Díaz se desmarcan de la dirección morada

No obstante, esta crítica no es unánime entre los morados. "La comunidad internacional no puede quedarse de brazos cruzados", advirtió poco más tarde Jaume Asens, presidente del grupo parlamentario de UP y diputado de En Comú Podem.

En la misma línea, se manifestó la vicepresidenta segunda: "El presidente cuenta con todo nuestro apoyo". Díaz también confirmó que estaban informados de la decisión de Sánchez. Con el paso de los días el asunto, lejos de resolverse, sigue dividiendo a la colación morada.

Para Montero "el envío de armas no va a ser una herramienta eficaz", para Belarra "es un error", mientras que para Díaz "la política exterior de nuestro país la lidera el presidente del Gobierno". En Podemos no ocultan las discrepancias internas, pero defienden que la coalición no está en peligro y que "lo importante" es que están de acuerdo "con pararle los pies a Putin".

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