La previsión
Desde Galicia hasta Andalucía, 'Irene' impactará con lluvias intensas y rachas de viento fuerte, afectando a dieciséis comunidades autónomas.
A principios de semana fue 'Hipólito' y ahora será 'Irene' la encargada de traer de nuevo lluvias y vientos a España. Dieciséis comunidades autónomas están actualmente en aviso naranja o amarillo debido a fuertes aguaceros, viento o fenómenos costeros. Los efectos de esta nueva borrasca comenzarán a notarse a partir de esta tarde, afectando especialmente a Canarias y Galicia, y se extenderán a partir de mañana a más zonas del interior y este del Mediterráneo.
Este martes ha sido un día gris y lluvioso en casi toda España, aunque con relativa calma. Las precipitaciones más persistentes se han concentrado en Galicia, el norte de Extremadura y la isla de La Palma. Una subida notable en las temperaturas ha sorprendido en esta época del año, con noches menos frías y heladas limitadas solo a áreas montañosas. La estación de Sierra Nevada, en Granada, ha registrado 4,6 °C bajo cero, seguida por Benasque en el Pirineo Aragonés, con -3 °C, y la estación de esquí de Baqueira-Beret en Lleida, con -2,2 °C a la 1:10 a. m., temperaturas bajas pero inusualmente altas para esta temporada.
[[H2:Alerta por la borrasca ‘Irene’]]
Con respecto al temporal de lluvia y viento se espera que, desde la tarde de este martes y hasta el viernes, las lluvias se extiendan por gran parte de la península. Los vientos del suroeste propiciarán acumulaciones significativas de lluvia en el oeste de Galicia, el norte de Extremadura, el oeste de Andalucía y la cara sur de los Pirineos.
Se prevé que los acumulados superen los 160 l/m² en algunas áreas. Además, las rachas de viento podrían exceder los 100 km/h en las costas gallegas, la cordillera Cantábrica, el sistema Ibérico y las sierras del sureste. Se espera un aumento del oleaje en el Mediterráneo. Las precipitaciones continuarán el jueves en gran parte del país, especialmente en el Cantábrico, donde se esperan nevadas en las montañas del norte tras el paso del frente, con un descenso en las temperaturas y la cota de nieve a partir de la madrugada del viernes.