Agua
El municipio de Barruelo de Santullán, en Palencia, anuncia cortes de agua por la extrema sequía. El alcalde asegura que eso ocurre por culpa del "comportamiento irresponsable" de algunos vecinos.
La sequía se ha convertido en una de las palabras más repetidas en España este verano, a causa de una escasez de lluvias que se produce incluso en el norte, una de las zonas tradicionales donde los chubascos siempre llegan de visita. Sin embargo, este año también da problemas allí. Los embalses en España están bajo mínimos, en medio de un calor sofocante, y ya hay algunos pueblos en los que se están llevando a cabo cortes de agua por la situación.
Es lo que está ocurriendo en el municipio de Barruelo de Santullán (Palencia), donde la escasez de lluvias ha llevado a que se hagan cortes de agua durante varias horas, que se han prolongado hasta este viernes. A partir de entonces, es probable que se tenga que llevar a cabo esta nueva medida en más ocasiones, suponiendo que no llueva, que es la esperanza a la que se agarran muchos para frenar esta situación que se prolonga desde hace ya bastantes semanas.
El alcalde del municipio, Cristian Delgado (PSOE), ha hablado en exclusiva con Antena 3 Noticias, indicando que "hay zonas donde ya parece que es otoño". Asimismo, asegura que "el comportamiento irresponsable" de algunos vecinos es el causante de que esta situación se esté produciendo. Explica que "si tenemos un comportamiento irresponsable, a eso de las seis de la tarde nos quedaremos sin agua también". Las multas por incumplir las normas pueden ser de hasta 3.000 euros.
Enfado entre los residentes
Los ciudadanos que viven en Barruelo de Santullán están desesperados por la situación y tampoco se han tomado bien que el alcalde haya hablado de "comportamiento irresponsable" cuando la gran mayoría sí cumple con las medidas. Un residente del pueblo, que lleva muchos años viviendo allí, propone "hacer una presa para que venga el agua" al pueblo, mostrándose indignado y resaltando que allí "nunca ha faltado el agua" hasta este año.
Entre las medidas que quedan prohibidas está llenar el agua de la piscina, lavar el coche, o regar los jardines. La Guardia Civil ya vigila de cerca la situación y permanecerá atenta a que la gente no se salte las normas. El paso de los días confirmará si la implementación de estas medidas son eficaces para un pueblo que se erige como el reflejo de lo que ocurre en muchos puntos de España, y que está afectando sobre todo, a la España rural y despoblada.