Litigio
El presidente de la Junta de Extremadura ha anunciado un recurso ante el Tribunal Constitucional para que el complejo 'Isla de Valdecañas', en Cáceres, no se derribe.
El complejo residencial 'Isla de Valdecañas', en Cáceres, es conocido como la Marbella extremeña. Después de muchos años de litigio, el Tribunal Supremo ha ordenado la demolición de todo el complejo residencial.
De esta manera, el Tribunal Supremo da la razón a los ecologistas porque ese complejo estaba construido en una zona protegida. Entre la demolición y las indemnizaciones, la Junta de Extremadura podría tener que pagar 145 millones de euros.
Se trata de una isla de 135 hectáreas rodeada por el pantano de Valdecañas. Hay más de 180 casas, un hotel, un campo de golf, pistas deportivas. Todo será demolido por una decisión del Supremo que revoca la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura que declaraba la imposibilidad de derribar lo construido por el coste que suponía.
Las quejas de los vecinos
Los vecinos explican que si el complejo desaparece muchos de ellos perderán su empleo porque el residencial ha traído grandes beneficios. El presidente de la Junta de Extremadura ya ha anunciado un recurso ante el Constitucional.
"El Marina Isla Valdecañas desde el primer momento es ilegal porque es un espacio protegido", dice Paca Blanco, de Ecologistas en Acción. Por eso, comenzó una lucha en los tribunales que dura casi 15 años y cuyo último episodio es la razón del Supremo a los ecologistas.
"Tendría un enorme coste para las arcas públicas de la Junta de Extremadura y, en definitiva para el bolsillo de todos los extremeños", dice el abogado de los propietarios. Guillermo Fernández Vara alude a los puestos de trabajo de los vecinos de El Gordo y el Berrocalejo, los pueblos de alrededor que tampoco entienden la decisión porque el complejo, aseguran, les trae dinero y trabajo.