Compra
En algunas ocasiones se consigue una compra más cara o de forma impulsiva gracias al neuromarketing y puede influir en las decisiones.
A la hora de la compra se intenta ajustar el presupuesto a aquello que se quiere comprar, pero no siempre es así, sobre todo en el terreno online. Las técnicas de neuromarketing dirigen nuestro cerebro para que se compre más.
En algunas ocasiones se consigue una compra más cara o de forma impulsiva y puede influir en las decisiones.
El neuromarketing es una disciplina que combina la neurociencia con el marketing para entender mejor cómo el cerebro de los consumidores toma decisiones de compra y cómo las emociones, impulsos y la percepción influyen en esas decisiones. Gracias a su uso, se puede entender cómo las emociones juegan un papel importante en la toma de decisiones de compra.
Así funciona el neuromarketing
Son numerosas las ocasiones en las que influye. En el caso de las páginas web, al entrar en una página de compra se mira dónde quieren que se mire en ellas. En este caso, el ojo humano por defecto va arriba a la izquierda. Estas son las zonas donde se coloca lo más caro para vender.
En la decisión de compra se utilizan tonos llamativos rojos y naranjas para enganchar. Sin embargo, a la hora de pagar se utilizan tonos blancos y azules para transmitir confianza. Incluso, en algunas ocasiones, también se incluye la opción de "hay x personas mirando este anuncio" o se indica que "son las últimas unidades".
Son técnicas que generan urgencia; legales aunque poco éticas y hacen que se compre más de lo que se necesita.