Déficit
El Gobierno fija el déficit público en el 3% del PIB para 2024, un año antes de lo previsto y después de que Bruselas anunciara mayores ajustes para países con déficit excesivo.
El déficit público describe una situación en la que los gastos del Estado superan a los ingresos. La tendencia de todos los gobiernos es reducir esa deuda. Este mismo jueves, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, aseguraba que se fijará un déficit del 3% del PIB para 2024, un año antes de lo previsto.
"Para el año 2024 vamos a cumplir con el Pacto de Estabilidad y el déficit de nuestro país se situará en el 3%", expresaba la ministra Montero en los pasillos del Congreso el mismo día que se ha aprobado la Ley de Vivienda.
El anuncio se ha hecho público tan solo un día después de que Bruselas avisara de que exigirá mayores ajustes a aquellos países cuyo déficit supere el 3% del PIB, como es el caso de España. También imponía multas en el caso de incumplimiento hasta que se adopten medidas "efectivas".
Desde la Unión Europea se pretende dar un impulso a la economía para reducir el déficit de los Estados. España, por ejemplo, acabó el pasado año con un déficit del 4,8% y una deuda del 113,2% del Producto Interior Bruto.
La reducción del déficit público al 3% de adelanta para un año antes de lo que estaba fijado. España enviará a Bruselas el programa de estabilidad en el que se compromete a fijarlo en el 3% para 2024. El 3% supone el límite máximo de déficit que van a permitir las nuevas reglas fiscales europeas.
Los nuevos cálculos del Gobierno sobre el déficit mantienen que para este 2023, el déficit será del 3,9% del PIB. En 2024 será nueve décimas menos (3%) y en 2025 se reducirá al 2,7%. Para 2026, bajará dos décimas respecto al año anterior, al 2,5%.
Los "buenos" datos económicos que engloban, según la ministra de Hacienda, un crecimiento superior a la media de la UE y la creación de empleo, permite acelerar este proceso - fijar el déficit en el 3% del PIB un año antes de lo previsto- y "además hacerlo justo antes de que se activen las reglas fiscales", ha señalado Montero. También destaca que la reducción se hará "sin recortes".
La previsión de la cartera de Hacienda es que el aumento de los ingresos se modere de cara a los próximos años, pero manteniendo un crecimiento superior a la previsión de inflación.
Se fija la reducción del déficit al 3% un año antes de lo previsto
Por otro lado, la ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, aseguraba que España tiene "un fuerte compromiso con la responsabilidad fiscal" y que está aprovechando "el crecimiento económico y la creación de empleo para reducir lo más rápidamente posible los ratios de déficit y deuda sobre el PIB", recoge 'Europa Press'.
El Gobierno mantiene "vigente" el objetivo de reducción del déficit público, "manteniendo el compromiso con la estabilidad presupuestaria a través de una senda de consolidación fiscal que llevará al déficit por debajo del 3% en 2025", recoge el Plan Presupuestario de 2023 del 15/10/2022.
"En el Programa de Estabilidad que fue remitido a Bruselas el pasado 30 de abril se incluía una senda de reducción paulatina del déficit público, que, a la vez, respalda la sostenibilidad presupuestaria a medio plazo, alcanzando un déficit inferior al 3% del PIB en 2025", añadía dicho informe presupuestario vinculado a la aprobación de la Ley de Presupuestos Generales de Estado para 2023.
Por tanto, ahora la ministra Montero, adelantaría esa previsión del déficit inferior al 3% del PIB para 2025 que se lee en el informe para el próximo año 2024.
Bruselas exigirá más ajustes a países como España
Tan solo un día antes de que Montero anunciara un reducción del déficit al 3% para 2024, Bruselas daba un 'toque de atención' a los países comunitarios: países cuyo déficit público supere el 3% del PIB, tendrán que acometer ajustes presupuestarios mayores que el resto. Entre esos países se encontraba España.
También apuntaba en la propuesta legislativa para la reforma del Pacto de Estabilidad y Crecimiento que la Comisión Europea a una serie de multas "automáticas y realistas" cada seis meses. Serán sanciones equivalentes al 0,05% del PIB que se acumularán hasta un máximo del 0,5%) hasta que se demuestren que se han adoptado "medidas efectivas".
Durante los próximos meses se negociará y debatirá las propuestas legislativas para formular un acuerdo para que el nuevo Pacto de Estabilidad y Crecimiento pueda entrar en vigor en 2024.