Numismática
Los expertos en numismática no solo van a la caza de pesetas antiguas de gran valor, sino que hay también una serie de monedas de euro exclusivas que alcanzan hasta los 3.000 euros.
Las monedas de dos euros valen dos euros, aunque no siempre. Muchas personas van con un puñado de monedas en el bolsillo sin saber que, quizás, una de ellas podría valer incluso más de mil veces su supuesto valor. Hay monedas de cinco pesetas por las que se podrían llegar a pagar hasta 36.000 euros, todo depende de la antigüedad y exclusividad de cada una de ellas.
Sin embargo, los expertos en numismática no solo van a la caza de pesetas antiguas de gran valor, sino que hay también una serie de monedas de euro que, debido a los pocos ejemplares que se fabricaron, poseen un valor mucho mayor del que tiene. Algunas, en cambio, su valor es menor que el monetario.
En este sentido, aparecen las monedas de uno y dos céntimos, que debido a su inutilidad se están acercando a su desaparición. Su hermana mayor, la moneda de dos euros, en cambio, está en una situación diametralmente opuesta. La facilidad con la que se encuentra y su utilidad hace que algunas de ellas muy específicas tengan un valor de hasta 3.000 euros.
Esta moneda se fabricó para conmemorar el vigésimo Día de la Juventud, que tuvo lugar en 2005. A pesar de que su valor no es excesivamente elevado, sigue siendo llamativo. Concretamente, para obtener un ejemplar de la moneda de Ciudad del Vaticano deberás desembolsar hasta 370 euros. El centro contiene la Catedral de Colonia junto a un cometa pasando por encima.
La segunda moneda de dos euros también procede del Vaticano y se puso en circulación un año más tarde, en 2006. Se trata de una moneda exclusiva la cual solo cuenta con 100.000 ejemplares. Por este motivo, es una de las que más valor poseen y, al mismo tiempo, más escasean. En total, cuesta alrededor de 200 euros y es un homenaje a los 500 años de la Guardia Suiza Pontificia.
Sin embargo, si hablamos de monedas exclusivas tenemos que hablar de la moneda de dos euros del Principado de Mónaco del 2015. A pesar de que únicamente tiene ocho años de vida, tiene un gran valor debido a que solo existen 10.000 ejemplares en todo el mundo. Puede llegar a costar mil euros y en ella se refleja la Fortaleza de Mónaco.
Otra moneda muy preciada por los coleccionistas es la acuñada en 2004 en el pequeño país de San Marino. Una moneda que se fabricó en homenaje al historiador numismático Bartolomeo Borghesi, lo cual hace que gane un valor especial. Así, los ejemplares de esta moneda se llegan a vender por 150 euros.
No obstante, la joya de la corona de las monedas de dos euros se fabricó también en Mónaco y cada ejemplar se vende hasta por 3.000 euros. Se puso en circulación en 2007 a modo de homenaje al 25 aniversario de la muerte de la actriz estadounidense Grace Kelly, que murió en las calles del Principado en 1982. Con suerte, los coleccionistas la pueden encontrar por 2.500 euros, aunque no es fácil ya que solo existen 20.000 unidades en todo el planeta.