ACLARACIÓN DEL TRIBUNAL SUPREMO
La Sala Civil del Tribunal Supremo ha dictado una serie de sentencias que vienen a aclarar el reparto de gastos en las hipotecas. Los gastos de notaría y gestoría se reparten a medias entre clientes y bancos, ya que son trámites que redundan en beneficio de las dos partes. El arancel registral es por cuenta del banco. La comisión de apertura de la hipoteca forma parte del precio de la misma, por lo tanto no intervienen, excepto para controlar la transparencia, en definitiva si se ha informado debidamente al cliente.
En el impuesto de hipotecas no hay cambios. Fue el motivo de la polémica: la Sala de lo Contencioso cambió de criterio establecido y lo adjudicó al banco, después -tras una larga y discutida deliberación en pleno- volvió a atribuirle el pago a los clientes. Al final el Gobierno cambió la ley, pero esto solo afecta a las nuevas hipotecas.