Fútbol
El capitán del Real Madrid puso el colofón a la fiesta de la decimoquinta en Cibeles con el momento más esperado.
Como marca la tradición, Nacho Fernández colocó la bufanda y la bandera del Real Madrid a la Diosa Cibeles en uno de los momentos más esperados, quizás el mayor de todos, en la apoteósica celebración de la Decimoquinta Champions del club blanco. Al igual que hizo el pasado 12 de mayo, cuando la plantilla prometió volver el 2 de junio, el canterano y ahora capitán subió la escalinata para coronar el monumento del madridismo y alzar la Champions al cielo de la capital de España.
Los campeones de Europa desataron la apoteosis total en Cibeles y mostraron una vez más que son mucho más que un equipo, son una familia, quizás el gran secreto de esta plantilla. Antes de que Nacho pusieran la guinda a la fiesta blanca, Toni Kroos se despidió del madridismo y nombró a Fede Valverde su sucesor, cediéndole el dorsal número 8, ese que ha llevado durante diez temporadas mágicas y que le han convertido en una leyenda viviente del Real Madrid.
"Muchas gracias por toda la ayuda, por todo el cariño en estos diez años. Han sido inolvidables, por vosotros y por mi equipo. No sólo son jugadores increíbles, son personas muy top. Tengo una casa y es aquí", afirmó Kroos ante la afición blanca en Cibeles.
Los aficionados rompieron al unísono cantando un 'Toni, quédate', antes de que la leyenda blanca confirmara que el número 8 era para Valverde.
"La temporada que viene mi número 8 está libre... ¿tenéis alguna idea? Para mí es un trofeo darle mi número a este chico, a Fede Valverde", exclamaba Toni Kroos.
"Gracias a Toni por todo lo que ha dado a este club, es un jugador que marca una leyenda. Gracias y Hala Madrid", respondía Valverde.
Otro de los momentos más destacados en Cibeles llevó al firma de Carlo Ancelotti, entrenador del Real Madrid, que quiso dar la oprtunidad a Güler de que pronunciara sus primeras palabras en una celebración blanca.
"He cantado, he bailado con Eduardo (Camavinga)... Ahora quiero una cosa, os presento a un chico muy interesante: Arda. Es muy tímido. ¡Dale, adelante!", exclamaba Ancelotti.
"Hola, madridistas. Estamos como familia, gracias por todo. ¡Hala, Madrid!", pronunció el jugador turco, visiblemente nervioso.
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