Osasuna
Locura total con los futbolistas en la plaza del Castillo tras el pase de Osasuna a la final de la Copa del Rey. Pablo Ibáñez, canterano rojillo, lideró la fiesta.
La tensión acumulada durante el partido y la prórroga que Osasuna ha disputado en San Mamés frente al Athletic Club ha dado paso a la fiesta en las calles de Pamplona cuando el árbitro ha pitado el final y certificaba así que gol del el canterano Pablo Ibáñezclasificaba a los rojillos para la final de la Copa del Rey.
El silencio que reinaba a esas horas en las calles de la capital navarra se rompió con los gritos de alegría y los cánticos habituales de los seguidores osasunistas.
Muchos de ellos fueron a la plaza del Castillo para celebrar la victoria intercalando gritos de 'Illa, illa, illa, nos vamos a Sevilla' con otros más tradicionales de las fiestas de San Fermín como el 'Riau riau'.
Los futbolistas también se acercaron a saludar a la afición y Pablo Ibáñez, autor del gol, tuvo unas palabras para la hinchada rojilla: "Hace unos años estaba ahí abajo como vosotros, pero ahora me ha cambiado la vida de un día para otro".
Ibáñez se acuerda de la final de 2005
Pablo Ibáñez estaba exultante: "La verdad es que no he visto ni entrar el balón, pero sabía que entraba y lo primero que me ha venido ha sido ir para allá corriendo porque esto va por toda esta gente que ha estado animando todo el partido", dijo tras el partido un Ibáñez acordándose de la final de 2005 que vivió de niño.
"Soy de Osasuna desde pequeño y viví esa final como aficionado con seis años", recordó emocionado y dispuesto a ganar la final que le medirá a Barcelona o Real Madrid. "Una vez que hemos llegado hasta aquí vamos a soñar y a por ella", se ilusionó.
Sin duda este ha sido el broche de oro para este 4 de abril, en el que se ha celebrado el cuarto peldaño de 'la escalerica' sanferminera.