Crisis Luis Rubiales
La expresidenta del CSD relata su encontronazo con Luis Rubiales en su despacho: "No se quería ir y se repantingó más en el asiento".
Irene Lozano, expresidenta del Consejo Superior de Deportes, ha analizado en Espejo Público de Antena 3 el caso Rubiales: "Cuando has tratado de cerca a Luis Rubiales, no me sorprenden muchas de las cosas que han ocurrido y que se supieron después de terminar mi mandato y este comportamiento suyo en la final del Mundial con las jugadoras. Poco sorprendida y con cierta tristeza porque está siendo evidente el contraste entre unos dirigentes del fútbol anclados en el pasado, con unas estructuras caducas, y unas mujeres jugadoras pujantes, luchadoras por sus derechos y que representan a la España de verdad".
"Rubiales va a resistir hasta que vengan los geos a echarle, pero es un zombi ahora mismo"
Quiere poner el foco en la Real Federación Española de Fútbol: "Hay que tener claro que las Federaciones son entidades privadas, aunque tengan competencias públicas delegadas, y tienen su propia organización; se organizan y se autogestionan. La responsabilidad fundamental hay que ponerla en la asamblea de la RFEF, que podía haberle planteado a Rubiales una moción de censura. Se limitó a pedir la dimisión, cuando en realidad tienen la facultad de destituirle. El Gobierno no tiene la facultad de destituirle, puede facilitar procesos sancionadores igual que FIFA, que no le destituye sino que le suspende. Es importante focalizar la responsabilidad en la propia RFEF". El CSD no podrá inhabilitarle al considerar el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) falta 'grave' y no 'muy grave' el beso de Rubiales a Jennifer Hermoso.
Irene Lozano cree que lo lógico es que Luis Rubiales hubiera dimitido ya: "Si él estuviera anclado en la realidad ya habría dimitido, es evidente que su comportamiento no ha sido apropiado y que no tiene apoyos. Solo tiene apoyos dentro de la RFEF. Particularmente el presidente Rocha es gente suya. Ha perdido el apoyo de Infantino, presidente de la FIFA, que lo tuvo en su momento. Si estuviera pensando racionalmente ya habría dimitido, pero no es así. Él va a resistir hasta que vengan los geos a echarle, pero yo creo que no va a aguantar. Él es un zombi ahora mismo".
También ha contado cómo fue su último encontronazo con el presidente suspendido de la Federación: "Le tuve que echar de mi despacho. Tenía una relación buena con él, como con casi todos los presidentes de Federaciones, pero se fue complicando porque él es una persona complicada. Él empezó a hacer acusaciones graves contra una persona de mi máxima confianza y le pedí que retirase esas palabras porque no podía consentir que hablase mal de una persona de mi equipo. Me dijo que no lo iba a retirar y le dije: 'Esta reunión se ha acabado, haz el favor de salir de mi despacho'. No se quería ir y se repantingó más en el asiento. Cogí el abrigo, se lo di y le dije que no me hiciera llamar a seguridad. Hasta ahí llegó nuestra relación y se acabó yendo".