EUROLIGA | KHIMKI MOSCÚ 75-61 FC BARCELONA LASSA
El |||Khimki en un partido vital en su lucha por alcanzar los cuartos de final de la [[LINK:EXTERNO||||||Euroliga]] (75-61). Los azulgranas llegaron a ir perdiendo por 23 puntos, la buena noticia es que lograron salvar el basket average particular con los moscovitas. Doellman fue el único que 'salvó los muebles' (14+7). El Barça se queda con un balance de 4-5 antes de sus dos batallas seguidas con el CSKA y Real Madrid en el Palau.
El FC Barcelona Lassa ha perdido contra el Khimki Moscú (75-61) en el Krylatskoye Sports Palace en un partido que era clave para sus aspiraciones de mantenerse en la zona de acceso al 'play-off' al llegar ambos con 4-4 en el balance del grupo, y deja escapar una gran oportunidad de coger aire antes de recibir en el Palau al CSKA Moscú, una dura prueba y más tras este duro golpe encajado que, no obstante, pudo ser peor pues finalmente salvaron los catalanes el 'average' contra el Khimki.
Mala imagen del Barça
Lejos de lo sucedido ante Olympiacos, con una reacción de campeón del Barça Lassa, el equipo mostró una cara mediocre en Moscú que le llevó a perder, pese a un partido para nada espectacular del Khimki, de hasta 23 puntos. Necesitaba el Barça, en caso de derrota, hacerlo por menos de 17 puntos, la renta que logró ante los rusos en el Palau Blaugrana (87-70), y esa diferencia la sobrepasó durante muchos minutos el Khimki.
Sin anotación exterior, sin ideas en general en ataque, dejando demasiado solo a un Samardo Samuels en la pintura que fue el creyente de la remontada, al Barça Lassa no le salió tan mal la jugada finalmente por el mal final de partido de un Khimki que tiró por la borda la oportunidad de arrebatar el 'average' a los blaugranas, algo realmente importante pues siguen estando separados por una única victoria.
Tímida reacción cule
El Barça mejoró tras el descanso y, en un tercer período extrañamante bajo en anotación (13-14) se aprovechó de la creciente 'pájara' local. El Khimki estuvo mal en la línea de tiro libre, y ahí el Barça sí fue muy superior. Fue un flotador al que acogerse junto a la fe de Samuels y el aislado aunque precios acierto exterior de Justin Doellman, cuyos triples permitieron finalmente al Barça quedarse con ese preciado y puede que clave 'average'.
Del +23 que tuvo el Khimki de máxima nada más empezar el tercer cuarto (56-33) se llegó al +11 del último periodo, una diferencia que metía al Barça en el partido visto el cierto auge del juego blaugrana y el creciente colapso ruso. Pese a ello, no estuvo bien el equipo de Pascual en demasiadas facetas, como el rebote, y si no se vio más perjudicado fue por el bajón inexplicable de un Khimki que tenía todo a favor. Sí, ganó, pero se quedó sin el premio extra.
Al final se luchó y se ganó el average
Aún así se pugnó al final por ese 'average'. No se luchaba por el triunfo, que cada vez era más claro para el Khimki, sino por esa posibilidad de quedar por delante del rival en caso de empatar a victorias y derrotas en este 'grupo de la muerte'. Antes del partido parecía blaugrana esa ventaja, al descanso era totalmente del Khimki y al final hubo tensión por ver quién se hacía con ella. Fue la tensión del partido, la incertidumbre y la emoción, porque poco más hubo.
Se entró en el último minuto con 75-61 y Davis falló inesperadamente bajo el aro. Pero perdió el enésimo balón el Barça y Rice volvió a fallar. Ese error del base estadounidense, el enésimo en una muy mala segunda parte que se extendió a todo el equipo, fue lo que finalmente salvó al Barça del desastre absoluta.
Al final un 75-61 que da ventaja al Khimki en la tabla y que deja al Barça tocado pero no hundido. Habrá que esperar otra reacción y otra noche mágica en el Palau contra el CSKA Moscú, el actual líder del grupo.