CINCO SIGLOS DE HISTORIA
Más de cinco siglos de historia y los jóvenes de Medinaceli aún se unen para preparar la celebración del festejo del toro júbilo. "Por cada santo se prepara una hoguera, que conmemoran que hace años se encontró una carreta con restos de cinco mártires", explica un vecino.
Todo se prepara para recibir a un morlaco rubio de más de 300 kilos. Los jóvenes se esfuerzan por conseguir enmaromar -atar con una soga- al toro al poste y colodar sobre su cornamenta una estaca donde se colocan dos enormes bolas que se elaboran con estopa, pez, aguarrás y azufre. Al animal se le cubre con una arcilla para evitar que se queme y entonces se encienden las bolas.