Parker

La sonda espacial Parker, muy cerca de "tocar el Sol" en Nochebuena: permitirá mediciones sin precedentes

Será el objeto fabricado por el ser humano que más cerca se ha colocado de la estrella del Sistema Solar.

Este 24 de diciembre, Nochebuena, la sonda espacial Parker se colocará a unos seis millones de kilómetros de la superficie del Sol siendo así el objeto fabricado por el ser humano que más cerca se ha colocado de la estrella del Sistema Solar, una distancia en la que podrá llevar a cabo mediciones sin precedentes, según ha comunicado la NASA.

Fue enviada al espacio en agosto de 2018 desde Cabo Cañaveral, Florida (EE.UU.), y pesa 685 kilos. Se creó con el fin de "tocar el Sol" al orbitar a partir de esta Nochebuena sobre la llamada 'Corona', la parte exterior de la atmósfera de la estrella, lo que hará protegido por un escudo térmico capaz de aguantar hasta 1.400 grados Celsius de temperatura.

Primer acercamiento de varios

El acercamiento hasta esa distancia, equivalente a nueve veces el radio del Sol, que hará el artefacto es el primero de varios que llevará a cabo hasta junio de 2025. Los realizará a una velocidad de 692.000 kilómetros por hora (430.000 millas).

Según la agencia espacial estadounidense, Parker se convertirá de esta manera en el objeto creado por el ser humano más rápido de la Historia. "Va a poder hacer mediciones de esta región inigualables, mediciones sin precedentes y que tienen el potencial de transformar nuestra comprensión del Sol", señaló recientemente a EFE Cristian Ferradas, físico espacial de la división de Heliofísica del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA.

Los ingenieros de la NASA calculan que desde su primer acercamiento a la estrella, la sonda habrá completado 24 órbitas al Sol, con un escudo térmico de carbono de 11,43 centímetros de espesor que mantendrá sus cuatro instrumentos de medición a temperatura ambiente, unos 29 grados Celsius.

"Si bien en esta región de la corona solar tiene una temperatura muy elevada la densidad es muy baja, es decir hay muy pocas partículas calientes que le transfieran energía a la nave. La corona es muy tenue y eso ayuda a que la nave no se derrita", explicó Ferradas.

Los investigadores de la NASA han advertido que no será hasta el próximo viernes 27 de diciembre cuando se reciban las comunicaciones de la sonda y se pueda evaluar cómo ha ido la misión.

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