COSTARÁ 250 EUROS
En noviembre de 2011 la comunidad científica anunciaba la puesta en marcha de una investigación cuyo objetivo era crear carne artificial en un laboratorio mediante la generación de tiras de carne a partir de células madre. Con este proyecto se pretendía buscar una alternativa a la falta de alimento en ciertos lugares del mundo y reducir posibles daños ecológicos y medioambintales.
Post ha explicado que su equipo ya ha reproducido con éxito las células de proceso con leche de vaca y suero de ternera, acercándose un paso más a la hamburguesa artificial.
Siguiendo el ritmo del proyecto, el científico ha señalado que la hamburguesa estará lista "en octubre" aunque sólo en fase de prueba, con el fin de que se analice la producción de este tipo de carne por primera vez. En este sentido, ha apuntado que "para empezar a analizar cómo es su apariencia, su textura y si sabe a carne, habrá que esperar" todavía algo más de tiempo.
En cuanto al proceso de elaboración, Post ha explicado que para hacer una hamburguesa completa se necesitan unas 3.000 tiras de tejido muscular, cada uno de los cuales mide unos 3 centímetros de largo por 1,5 centímetros de ancho, con un grosor de medio milímetro. Además, se necesitan seis semanas para producirla, durante las cuales la carne se tritura con 200 tiras de tejido graso.
Para producir la carne, las células madre se colocan en un caldo que contiene nutrientes vitales y de suero de un feto de vaca que les permitan convertirse en células musculares y se multiplican hasta 30 veces.
El investigador ha destacado que a pesar de que es posible extraer un número limitado de células madre a partir de las vacas sin tener que matarlas, la manera más eficiente de llevar adelante este proceso "todavía es la masacre". "Mi visión es que, con el tiempo, un ganadero, coja a algunos de sus animales para crear un rebaño que sea exclusivo para donación", ha apuntado Post, quien ha añadido que "cada animal sería capaz de producir alrededor de un millón de veces más carne a través de la técnica basada en laboratorio que a través del método tradicional de carnicería".
Por el momento, la primera hamburguesa artificial tiene un tinte rosado y amarillo, pero el profesor ha señalado que espera producir tiras de carne con un color más auténtico en un futuro próximo. Entre otras de las 'cosas pendientes' que este proyecto tiene que estudiar es la necesidad de sangre artificial que, según Post, "permitiría hacer las tiras de carne más gruesas".
Del mismo modo, está el elevado precio al que tendrían que vender estos productos para contrarrestar el caro proceso de elaboración. Así, según los expertos, la primera hamburguesa costará 250 euros. Ante esta situación, Post ha indicado que esperan que, con el tiempo, este proceso se vaya agilizando y se vayan mejorando las técnicas para abaratar la carne.
Este proyecto está financiado por un benefactor anónimo a quien invitarán a comer el primer filete de carne artificial. "El es quien tiene que decidir si quiere comerla o no", ha señalado Post.
Sin embrago, no sería el primer en probarla, ya que un periodista ruso ya la ha comido tras una visita al laboratorio en donde se está 'cocinando' el proyecto. "Nos arrebató un trozo de carne de cerdo y dijo que no sabía demasiado", ha confesado el científico.