Alonso mantiene el liderato del Mundial tras el triunfo de Webber en Silverstone

Finalmente no pudo ser. A pesar de que Alonso lideró el GP de Gran Bretaña durante casi el 90 % de la carrera, finalmente cayó ante el empuje del Red Bull de Mark Webber. El australiano se impuso en las vueltas finales en su lucha con el asturiano y se adjudica una victoria que celebró en el podio junto al propio piloto español y con un Sebastian Vettel que acabó tercero.

Y todo empezó con la segunda parada. Una parada en la que la misma estrategia que aupó a Fernando al liderato en los primeros compases de la carrera y le hizo ganar distancia con sus perseguidores se volvió en su contra. Los mismos neumáticos duros con los que Alonso llegó a estar a seis segundos de Webber fueron los mismos que permitieron al Red Bull pasar al Ferrari como si el monoplaza rojo fuera un coche de papel.

Y Webber confió en el poder de los duros para el tramo final, mientras que Alonso puso sus esperanzas en los blandos. Dos estrategias diferentes, dos estrategias que en cualquier otro trazado habría sido más acertada para Fernando, pero no fue así en Silverstone. Porque sobre el trazado británico los duros se deslizaban sobre la pista mientras que los blandos se degradaban a velocidades alarmantes.

Tal fue la degradación sufrida que las últimas vueltas fueron un suplicio. Y una lástima, porque hasta esa parada, esa parada que cambió todo y que dirigió la victoria hacia Webber, Fernando había comandado sin mayores problemas que el no salirse de pista y el ir quitándose de en medio a los pilotos doblados mientras lideraba sin ver a nadie por los retrovisores.

Dominio de Fernando hasta las últimas cinco vueltas
Porque la salida fue como fue, y fue como las que Alonso suele hacer. Una salida perfecta a la par que arriesgada a pesar de ser el hombre de la pole. Perfecta porque mantuvo la posición, y arriesgada porque se cruzó literalmente a un Webber que hasta se asustó de la maniobra del asturiano mientras veía alejarse poco a poco al Ferrari en la lejanía.

Y ni le vio cerca hasta las vueltas finales. Porque en las paradas Fernando tampoco sufrió en exceso y cada cambio de neumáticos se traducía en una batalla ganada con Webber. Y es que sólo Hamilton puso en apuros al asturiano, unos apuros innecesarios, porque mientras Alonso ya había parado Lewis no lo había hecho. Aunque, a decir verdad, esa pugna se convirtió en uno de los momentos más bonitos de este Gran Premio.

Y de Hamilton también. McLaren corría en casa y en casa naufragó. Ni Lewis ni Jenson Button dieron la talla sobre Silverstone y los dos pelearon por dos objetivos que están lejos de lo que ellos querrían. Tanto uno como otro no pelearon por victorias o por el podio, sino por entrar en los puntos. Algo que consiguieron, y no sin sufrimiento.

Como también fue sufrida la carrera de Grosjean, pero la suya terminó con un final feliz, bastante más feliz que la de McLaren. Porque Romain paso de ver peligrar su participación en pista por un incidente al comienzo de la carrera a conseguir un sexto puesto, justo por detrás de Kimi Raikkonen, y de Massa, que se mostró muy competitivo en este Gran Premio.

Maldonado saca a Pérez de la carrera
Pero para incidente el de Maldonado. El enésimo de Maldonado, un piloto que empieza a ser conocido por sus  toques con el resto de compañeros que por sus hazañas sobre la pista. Si en el GP de Europa lastró todo el trabajo de Hamilton, ahora le ha tocado el turno a Sergio Pérez. El mexicano ya tenía casi adelantado al venezolano en una curva pero éste decidió abrirse y chocar así con el Sauber, que terminó fuera de pista.

En ella siguieron los HRT, que lograron terminar en un Gran Premio que parecía de todo menos apto para ellos. De la Rosa, único piloto sobre pista que fue a una parada, terminó en la vigésima plaza, justo por delante de Narain Karthikeyan. Los dos lograron lo que ni Pérez, ni Di Resta ni Petrov hicieron, que fue acabar la carrera. Bueno, Petrov ni la empezó al quedarse parado su monoplaza en las vueltas previas a la carrera.

Termina así la carrera de Silverstone, una batalla pasada por agua en la clasificación que Alonsó manejó con soltura logrando su primera pole de la temporada y la primera desde Singapur 2010. Una pole que no pudo culminar con una victoria que cayó de lado de Webber y que permite al australiano recortarle puntos al español en el Mundial, estando a trece. La siguiente cita, en Alemania.