Enrique y Víctor se encaran
Enrique y Víctor se encaran
Antes de que se produjera este encuentro, Enrique le dejó muy claras las cosas a Enrique. A partir de ahora el nuevo jefe de Bárbara y Cristina tiene prohibido acercarse a "Esa boca, a esos labios y a esas caderas que son mías", palabras textuales del arrebato de celos de Enrique. En ese momento aparece Cristina para poner fin a la discusión y salir en defensa de su nuevo amante. Enrique tiene claro que no quiere que Víctor trabaje para su mujer pero su hermana se ocupa de recordarle que su mujer tuvo que soportar durante mucho tiempo que él tuviese una relación en secreto con Patricia. Víctor, ante este ataque, se excusa en que lo único que hace es evitar que su mujer se vuelva a equivocar.
Antes de que se produjera este encuentro, Enrique le dejó muy claras las cosas a Enrique. A partir de ahora el nuevo jefe de Bárbara y Cristina tiene prohibido acercarse a "Esa boca, a esos labios y a esas caderas que son mías", palabras textuales del arrebato de celos de Enrique.
En ese momento aparece Cristina para poner fin a la discusión y salir en defensa de su nuevo amante. Enrique tiene claro que no quiere que Víctor trabaje para su mujer pero su hermana se ocupa de recordarle que su mujer tuvo que soportar durante mucho tiempo que él tuviese una relación en secreto con Patricia. Víctor, ante este ataque, se excusa en que lo único que hace es evitar que su mujer se vuelva a equivocar.