Capítulo 15

Damián intenta que Jesús abra los ojos sobre Begoña: “¿Vas a ser incapaz de tragarte tu orgullo para hacer feliz a tu mujer?”

Jesús le ha contado a su padre que no quiere que su esposa ejerza de enfermera y él ha intentado que cambie su actitud.

Begoña le ha planteado a Jesús la posibilidad de trabajar como enfermera, pero Jesús, para decepción de su padre, no va a permitirlo bajo ningún concepto. ¡No es una mujer cualquiera! ¡No tiene por qué trabajar!

Si Jesús se enamoró de Begoña fue por sus valores propios y su independencia; Damián se lo ha recordado: “Abre los ojos”. Si se niega a aceptar a su mujer tal y como es, siempre estará insatisfecha. ¿De qué tiene miedo? ¿De que ejerza su vocación?

A pesar de lo que piensa Jesús, a Damián no le preocupa que Begoña guarde silencio. Se fía más de ella que de su propio hijo: “¡Eres un bocazas!”.

Damián no puede creerse como el orgullo de Jesús es más grande que su amor a Begoña y le ha hecho una advertencia: si no aprende a tener empatía se quedará completamente solo. ¿Aceptará Jesús los deseos de Begoña? ¿Aprenderá a ponerse en el lugar de los demás? ¿Cederá a que ayude a Luz en el dispensario?