Capítulo 1

¡Andrés y Begoña se conocen sin saber que son cuñados!: “Menudo impertinente”

Los jóvenes tienen un encuentro en la montaña sin saber que son familia... ¡Y su primera impresión no va nada bien!

Andrés ha vuelto a Toledo tras cinco años fuera en el ejército. El pequeño de los De la Reina regresa tras una grave lesión que le ha dejado medio cojo, y tiene que ayudarse de un bastón constantemente.

Cuando se baja del autobús lo primero que se encuentra es a una mujer que está pasando apuros con la cámara de fotos, y se acerca a ayudarla. Begoña se muestra reacia a la ayuda de un extraño desde el primer momento, pero él trata de hacer chascarrillos para acercarse a ella. ¡Aunque parece que no funciona!

“Llámeme señora, si no le importa”, trata de zanjar Begoña. Sin embargo, al montarse en el coche, no arranca y Andrés la mira con todo jocoso: “Me huele a mí que son los platinos, no tiene chispa”.

Ella le sorprende rebatiéndole sobre coches, algo bastante inusual para el año 1958, pero Begoña es una mujer con estudios. Andrés, que quiere seguir hablando con ella, termina por irse ante lo desagradable que es ella.

Cuando se marcha, Begoña se queda tranquila... ¡Le ha parecido un impertinente! ¿Qué pasará cuando descubran que son cuñados?