Ilgaz dispara a Kadir en venganza por la muerte de su padre, pero... ¡todo era un sueño!

Metin ha sido asesinado a manos de Kadir o alguno de sus hombres. Sus familiares y amigos están desolados e Ilgaz, sus hermanos y Merdan no levantan cabeza.

El fiscal Kaya, sumido en un profundo dolor, solo consigue salir de su oscuridad cuando sabe que solo tendrá paz cuando encuentre a Kadir y pueda vengar la muerte de su padre.

Kadir se presentó, malherido, en la casa de su hermano y marido de Nadide pidiendo auxilio, pero días después se marchó. ¡Sabía perfectamente que la policía no iba a parar hasta encontrarlo!

Lo cierto es que no se equivocaba e Ilgaz y la policía… ¡consiguen dar con su paradero! Kadir se enfrenta al fiscal y le dice que su padre fue muy valiente. El mafioso le cuenta que Metin sabía que iba a morir y que aun así, se atrevió a dispararle.

Kadir sigue su discurso y le confiesa que no fue él quien acabó con la vida de su padre si no que… ¡fueron sus hombres que lo dispararon después de que él lo hiciese primero!

Ilgaz se queda sin palabras y, en un acto de rabia, venga la muerte de su padre... ¡matando a Kadir con un disparo en la cabeza! Sin embargo, parece que nada es lo que parece y que todo… ¡se trata de un sueño o una pesadilla!

Ilgaz se despierta sudando mientras Ceylin le dice que ha hecho lo correcto: “Es lo que tu padre hubiese querido”. ¿Qué habrá pasado en realidad?