TEMPORADA 1 - CAPÍTULO 8
Leire y Joel se besan apasionadamente
La gente de Calenda no quiere que Sara y Leire sigan viviendo en el pueblo. Por eso, comienzan a hacerles la vida imposible. Hasta tal punto que secuestran a la hija de la jueza. Joel lo descubre y va en su busca. Con la emoción del momento ambos se funden en un apasionado beso. ¿Te ha gustado esta secuendia? ¡Repasa los mejores momentos del capítulo!
El alcalde está convencido de que la jueza es la culpable de todos sus problemas recientes, incluida la muerte de su mujer. Va a ir a por ella con toda su artillería hasta destruirla por completo. Para empezar, ha puesto al pueblo en su contra, todos están convencidos de que Sara es la causante directa de la muerte de Isabel. La jueza ha comenzado a recibir llamadas amenazantes pero las agresiones no han hecho nada más que empezar y acabarán convirtiéndose en algo muy grave, sobre todo para Leire.
Nacho y Vera tratan de llevar su relación a escondidas quedando lejos del pueblo, pero se les ha roto el preservativo y no les queda más remedio que ir a la gasolinera. Cuando Vera entre al establecimiento se convertirá en testigo directo de un atraco a mano armada.
Raúl ha caído en una fosa repleta de huesos, no sabe si humanos o no. Intenta llevarse consigo todos los que puede, el ADN de los restos servirá para identificar a las víctimas y, tal vez, desentrañar el misterio que esconde la reserva. Pero su preocupación más inmediata es ahora otra: cómo salir de la reserva sin ser interceptado por los Guardabosques. El alcalde ha dado la orden de soltar a los perros, si le capturan no quedará ni rastro de él. Afortunadamente cuenta con un ayudante inesperado: Damián.
A Leire le han concedido la beca, en unos meses se irá a vivir a París. Aunque ni ella misma se lo cree, trata de convencer a Joel de que ése es el sueño de su vida: dedicarse al ballet, vivir en París, contemplar la ciudad desde lo alto de la torre Eiffel… Joel decide enseñarle su propia torre Eiffel, la que tienen en Calenda, en un recóndito lugar del bosque donde los jóvenes vivirán un momento mágico. Sin embargo, Joel está más cauto que nunca. Según su padre le ha explicado, si se enamora de Leire será para siempre y cuando ella se vaya llorará eternamente su ausencia.
Olivia no ha pegado ojo, agobiada por la culpa de haber mentido a Sara fingiendo un robo en su casa y de haberle dado una información al alcalde que seguramente le inculpaba en turbios asuntos. Además, está Fernando, que lo vio todo y es posible que la delate. Para colmo de males, Tomás se niega en redondo a someterse al tratamiento médico experimental por el que su madre se ha metido en todo este lío y traicionado a sus amigos.