La suerte por fin sonríe a Carmela: ¡se reencuentra con su hija María y conoce a su nieto!

Tras la muerte de Schiavon, María va a una tienda de empeños para intentar conseguir algo de dinero por una cadena que su difunto marido le regaló, ya que la situación económica en su casa es complicada.

Al abrir el collar, el dependiente se encuentra con dos fotografías: una de María y otra de Turi, el primer marido de Carmela. La cara de el joven cambia por completo y le pide a la granjera que lo acompañe.

Sin entender qué es lo que ocurre, Carmela espera hasta recibir la mayor de las sorpresas: ¡María aparece por la puerta! Su marido y ella montaron ese negocio mientras buscaban a su familia. “Sabía que estabas viva”, le dice Carmela a su hija emocionada.

La sorpresa no acaba con ese emotivo reencuentro. El marido de María le presenta a Carmela a el niño que han tenido, su nieto Salvatore. ¡Qué momento más bonito nos han regalado!