Han visita a Hikmet y abre de par en par su corazón: "No te mueras, papá"

Parece que lo ocurrido en el hotel con Rüya, ha hecho recapacitar a Han y se ha dado cuenta que su familia le importa más de lo que cree.

Han consigue entrar en la habitación de su padre, sin que sus hermanas lo vean, gracias a la ayuda de Rüya.

Allí comienza una dura conversación con su padre que parece que está en la cama dormido.

La conversación comienza con unas palabras llenas de tristeza y reproches hacia su padre: “Yo no esperaría ni un minuto más”, argumentando que la vida es un infierno además de fuego que quema, pero que no mata: “Puede que tu pena esté a punto de acabar y, si es así, quiero despedirme”.

Su dura despedida también tiene un mensaje para Inci: “Si te encuentras con Inci en ese lugar, dile que estoy bien”, para acabar abriendo su corazón de par en par y reconocer que su padre, a pesar de lo que hiciera o no hiciera en su vida, es una buena persona: “Irás a un buen lugar”, le dice a punto de llorar, “Gracias, papá, por todo”.

Han, más sincero que nunca y roto de dolor, le dice a Hikmet que si se va, no podrá cuidar de sus hermanas: “Ya no tengo fuerzas para ayudar a nadie”, para terminar pidiéndole una última cosa: que se quede con ellos un poco más. “No te mueras, papá”.

Lo que Han no se puede ni imaginar es que su padre en realidad no estaba dormido y que ha escuchado todo lo que su hijo le ha dicho…