Carmelo: "Adela Arellano, ¿me haría usted el honor de ser mi esposa?"
La pareja que hacen Adela y Carmelo no puede parecer más perfecta, y no hay mejor momento que este para que Carmelo deje atrás sus miedo a ser rechazado y se aventure a proponerle matrimonio. La cara de Adela habla por sí sola, sin embargo, aún no ha dado ninguna respuesta a la proposición... ¿Se cumplirán los miedos del señor Leal o se aproxima una nueva boda en Puente Viejo?