Lunes 29 de agosto
La familia Castañeda, y política, se reconcilian pero acuerdan conjuntamente poner una denuncia por desaparición.
Severo informa a Lucas y Sol de lo que han dicho los abogados, así la situación se complica. Leoncio provoca a Severo y éste termina dándole un puñetazo. Sólo quiere que lo deje en paz para poder dedicarse a solucionar el asunto del niño.
Por su parte, Lucas y Sol deciden escapar. No quieren perjudicar a Severo ni perder a su bebé.
Camila ofrece a Matías a acompañarlos en el entierro de Manuela. Él lo agradece, pero dice que no. Y así, tiene lugar el emocionado e íntimo entierro de Manuela. Mientras, Matías se cuela en la sala de lectura, presumiblemente, con malas intenciones, y así Hernando coge a Matías robando.
Raimundo pide ayuda a don Anselmo para averiguar qué ocurre con Francisca. Ella empieza a tener alucinaciones por la sed y el hambre: entra en pánico al ver que se abre la puerta.
Martes 30 de agosto
Matías reconoce que intentaba robar, pero Hernando reacciona positivamente, aunque no se sabe en qué queda la conversación. Mientras, los dos adolescentes parece que no terminan de congraciarse, y Camila detecta la pena de Beatriz.
Emilia informa a Alfonso de su intención de presentarse en La Casona; sabe que su padre se desespera al no tener noticias de Francisca y creerla encerrada, pero también que ella sabe manejar mucho mejor al Intendente que su padre, por eso, será ella la que acuda en busca de respuestas.
Cristóbal y la tía Eulalia no van a aflojar en su trato casi inhumano hacia Francisca y así, comienza a desvariar y en La Casona se recibe una llamada de Emilia Ulloa quien se presenta en La Casona y se entrevista con Cristóbal.
Cristóbal acompaña a Emilia a visitar a Francisca y la hija de Raimundo entiende que está enferma, pero lo que no espera es lo que viene a continuación: Cristóbal le pide a Emilia que trabaje para él por el bien del pueblo, pero cuando lo hace, alarga la mano para rozarle el pelo; Emilia se queda parada.
Sigue sin haber noticias de Mariana, y las relaciones entre Nicolás y los Castañeda tampoco se suavizan.
Miércoles 31 de agosto
El ruido que asustó a Camila era su propio marido, quien ha sufrido una pesadilla. Al día siguiente, Hernando va al cuartel. Camila da por hecho que tiene que ver con Elías y no también con Matías.
Emilia siente la leve caricia de Cristóbal como una agresión: lo rechaza frontalmente. Emilia vuelve aturdida a la casa de comidas, donde da explicaciones a su padre y a Mauricio pero con cierto aire esquivo que no pasa desapercibido para nadie. Por su parte, Cristóbal sube dispuesto a presionar aún más a Francisca.
Carmelo y Severo se disponen a ocuparse de Atilano. Lucas irrumpe y se niega a permitirlo, además, ellos ya han puesto remedio a la situación: tienen determinado fugarse. Ante esto, Carmelo y Severo hacen ver a Lucas que deben dar una respuesta definitiva al problema, pues huir sólo aplazará el problema.
Carmelo, Severo y Lucas han quedado con Atilano para hacerle una oferta que él rechaza frontalmente para sorpresa de todos. Por otro lado, Candela confiesa a Sol que ha detectado que planean huir. Le pide que lo piense bien, por todos.
Matías se ha citado con su hermano, van a terminar con la presión de una vez para todas, aquí mismo.
La estrategia de Cristóbal sigue adelante y Francisca cree ver al mismísimo Salvador Castro que parece venir a por ella desde el infierno. La mujer está verdaderamente aterrada.
Jueves 1 de septiembre
Francisca se rompe: la visión de Salvador es la gota que colma el vaso de su sufrimiento, aceptará cuanto le digan. En el pueblo, mientras, Emilia informa a Fe y Mauricio. La doncella sabe tan poco de Francisca como Mauricio.
Matías entrega el dinero a Zacarías y éste lo toma comprometiéndose a no volver jamás. Cuando se encuentra con Hernando, dejan entrever que se traen algo entre manos.
Hernando propone a Nicolás que le ayude, le vendrá bien tener la cabeza ocupada, y también su amistad.
Los hombres de Miel Amarga reciben una llamada de Atilano; está dispuesto a negociar si la suma empieza en el doble de lo que le han propuesto.
Y así, viendo el cielo abierto, la familia al completo decide pagar para librarse de Atilano. Además, tratarán de acelerar todos los papeles que vinculen a Sol y Lucas con Marcos para que el padre no pueda volver en un futuro a reclamarlo, ¡manos a la obra!
La tía Eulalia se encuentra a Francisca sufriendo una crisis que teme pueda terminar trágicamente… Cuando la mujer corre en busca de Cristóbal, se encuentra su puerta cerrada.
Beatriz confiesa a Camila que está pensando en romper con todo y marcharse para siempre.
Viernes 2 de septiembre
Beatriz quiere estudiar Bellas Artes en Madrid y pide a Camila que la ayude a convencer a su padre, de esa manera conseguirá formarse y a la par, olvidar el proceso amoroso por el que está pasando.
Francisca está mal, al borde de la muerte, y tienen que recuperarla físicamente para poder despojarla de sus posesiones. Francisca tiene miedo de comer, pero Eulalia la obliga.
Nicolás finalmente acepta y agradece el trabajo que le ha ofrecido Hernando, pero cuando se cruce con Matías en los Manantiales, el sobrino le dirá cuatro verdades que herirán al Ortuño. Así, Nicolás llevará a Juanita a los Manantiales, de forma que Camila pueda a ir poco a poco haciéndole entrar en razón del castigo innecesario que supone para Rosario no poder ver a su nieta. De pronto, Nicolás llega desencajado: ha recibido noticias de Murcia.
Los cuidados empiezan a surtir efecto y Francisca firma la primera tanda de papeles. Cristóbal disimula pero no puede dejar de pensar en Emilia mientras prepara algo contra uno de los Castañeda.
Sol y Lucas acuden al encuentro de Atilano, que reacciona mal al ver que le van a devolver al niño en lugar de darle dinero.