Un apretón y una fiesta sorpresa dejan al ‘Cuerpo de Élite’ con el culo al aire
Ximo llevaba días esperando su momento para ir al baño y poder deshacerse del microchip. Al inicio de la subasta, Ximo tuvo que ausentarse porque su momento había llegado y Elena era la encargada de dirigir la misión. Sin embargo, decidió aprovechar ese tiempo para organizar una fiesta que cambiaría por completo la reputación de su hijo en el colegio.