Resumen

En el tercer capítulo de Beguinas: complicidad, investigaciones y una celebración interrumpida

Lucía y Telmo han compartido momentos muy cercanos mientras las libertas han celebrado el nombramiento de Marie Anne como nueva gran dama.

En el tercer capítulo de Beguinas: complicidad, investigaciones y una celebración interrumpidaAntena 3

Lucía está dispuesta a hacer lo que sea para descubrir quién está detrás de la muerte de su madre. Precisamente por eso, la joven le pidió ayuda a Telmo para ir a hablar con un hombre que podría tener la respuesta que ella buscaba.

Unirse en esta investigación unió todavía más a Telmo y a Lucía. El joven le demostró a la aristócrata que le preocupaba que le ocurriese algo y dejó caer su interés en ella, algo que parece recíproco.

Con quién también fue muy amable Telmo fue con Juana, la hermana de Lebrín. La joven se sonrojó a ante las palabras del panadero y parece que podría sentir algo por él, aunque todo apunta a que Telmo solo tiene ojos para otra mujer.

La muerte de Lucrecia y los últimos acontecimientos ocurridos en el beguinato han agravado la situación económica de las libertas. Por ello, organizaron una subasta en el pueblo para recaudar algo de dinero. Todo parecía ir mal, hasta que Lucía apareció con su vestido de novia y lo vendió a muy buen precio.

En esa subasta, Marie Anne se vio obligada a vender un libro al que tenía mucho cariño y que le había regalado en su juventud Gabriela. Justo cuando pensaba que lo había perdido, el padre Gonzalo se lo entregó en nombre de su madre. ¡Gabriela no podía permitir que Marie Anne se quedase sin él!

Las libertas organizaron una pequeña celebración en honor al nombramiento de Marie Anne como nueva gran dama, pero todo saltó por los aires cuando Simón irrumpió en la hoguera y se cayó desplomado al suelo. Catalina salió corriendo del beguinato gritando: “Es el maligno”. ¿Qué consecuencias traerá lo ocurrido a las libertas?