Sara Reeves llega al pueblo y, además de protagonizar un incidente en la posada de La Maña, entra en contacto con el periodista Peralta y el violento mundo de los bandoleros. Conocerá en una comprometida situación a Roberto y también será detenida por un malentendido por el teniente Romero, que le recomienda abandonar el pueblo cuanto antes, ya que no es un sitio apropiado para una extranjera distinguida.
Tras un violento encontronazo entre la banda de Carranza y la Guardia civil, el líder de los bandidos ha descubierto a un agente infiltrado en su banda. Se bate en duelo con él, acabando con su vida. Su cadáver aparece en la plaza del pueblo, para demostrar a las autoridades que el veterano Carranza sigue siendo un temible bandido.
Álvaro Montoro, al descubrir que su hermana Eugenia está siendo pretendida por un torero de mala fama, pone en marcha un plan para zanjar esa relación.
Roberto está cansado de ver cómo su padre Tomás se pliega constantemente a las exigencias de los poderosos Montoro. Cosme también critica la actitud algo servil de su yerno Tomás, que sueña con un futuro mejor gracias a una inversión que piensa llevar a cabo sin consultar a la familia.