Julián Azevedo tiene 58 años. Exiliado en México al estallar la guerra, se enamoró de Matilde cuando ambos coincidieron allí en la Facultad de Filosofía, como profesor y alumna. Es un hombre de aspecto distinguido, bien conservado para su edad, culto, inteligente y buen conversador. Regresa a España con la intención de quedarse y comprobar cómo ha quedado el país tras el franquismo. También quiere buscar a su hermano a quien abandonó antes de partir.