María le hace una encerrona a Gonzalo con su padre. A pesar de que Rafael le advierte de que no va a salir bien, María organiza una fiesta de médicos donde asistirá el padre del camarero. Como resultado final, el padre encuentra en el almacén a Gonzalo y se va sin dirigirle la palabra. María intenta explicárselo a Gonzalo, pero éste no quiere saber nada de ella.