Exclusiva
La zona restringida a la que accedió Álvaro Prieto tenía poca seguridad: "Te puedes colar, eso está claro"
En 'Y ahora Sonsoles' hemos hablado en exclusiva con un empleado del sector ferroviario que ha asegurado que la zona en la que ha sido hallado el cadáver del joven cordobés desaparecido el pasado 12 de octubre en Sevilla solo tenía una valla como mediada de seguridad.
Un trabajador de Renfe aseguró en exclusiva para 'Y ahora Sonsoles' que a Álvaro Prieto, el joven desaparecido el pasado 12 de octubre y cuyo cadáver fue hallado entre dos vagones de un tren, se le ofreció ayuda y no quiso aceptarla.
En 'Y ahora Sonsoles' hemos hablado en exclusiva con un empleado del sector ferroviario, que ha reconocido que, a pesar de la seguridad en las estaciones, es fácil acceder a zonas restringidas. "Una persona con picardía se puede colar sin problemas", ha confesado.
También ha asegurado que la zona de los trenes es una zona peligrosa y que, aunque sean vías de talleres, la catenaria tiene corriente. Precisamente este es el elemento con el que Álvaro se ha electrocutado y ha fallecido.
Además, este empleado ha confesado que no hay seguridad controlando la entrada a esta parte de la estación y que todas las medidas que hay son el vallado. "Te puedes colar, eso está claro", ha dicho.
Por tanto, Álvaro Prieto podría haber accedido sin complicación.
En cuanto al por qué han tardado tanto en encontrarlo, el trabajador ha explicado que al ser un puente, los servicios tanto de Renfe como de Adif son de guardia, por lo que no estaban trabajando en los trenes. "Puede ser que nadie se había acercado por ese tren", ha afirmado.
Relativo al accidente, el empleado cree que intentó saltar de un vagón a otro, se desestabilizó y se agarró al cable que tenía encima. "Ese cable no está protegido y da mucha corriente", ha explicado.
Los últimos pasos de Álvaro Prieto
Juan Cano, periodista de Diario SUR, ha explicado en exclusiva en 'Y ahora Sonsoles' que el joven trató de colarse hasta en tres ocasiones, siendo la última la que le costó la vida.
El periodista ha explicado que los trabajadores de la estación le ofrecieron un cargador, pero él lo rechazó porque pensaba que el móvil estaba roto.
Después fue a la taquilla e intentó pagar un billete de AVE, pero solo tenía una tarjeta sin contactless. De nuevo, lo invitaron a cargar el móvil.