Un vecino de Ferrol termina con la cara destrozada por quejarse del ruido: "No pude hacer nada"

Valentín, un vecino de Ferrol, ha sido apalizado en su casa tan solo por quejarse del ruido. A las 5 de la mañana, decidió tirar un vaso de agua para calmar el jaleo en la calle. "Hice mal", advierte, viendo los resultados de su arrebato.

Cuando fue a abrir la puerta, un chico y una chica empezaron a asestarle golpes y puñetazos, casi arrebatándole la vida. Valentín terminó con varios puntos y el rostro destrozado. "Estaba con la mandíbula desencajada", asegura una testigo.

La víctima ha denunciado la falta de seguridad del barrio, señalando que no es la primera vez que ocurre. "Es imposible descansar", ha añadido.

Valentín ha admitido que, pese a las consecuencias, decidió abrir la puerta a los agresores porque estaban a punto de tirarla abajo.

En Y ahora Sonsoles hemos visto muchos casos de palizas brutales, como la de la orquesta de El Barco de Ávila.