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Se sube a un taxi con dos escopetas para buscar a la policía tras llevarse su coche: "No tenemos seguridad alguna"

El conductor malagueño se sorprendió al ver que un hombre armado subió a su coche armado y diciéndole que siguiera el camino que decía para matar a los trabajadores de la grúa que se había llevado su coche. Él pudo evitar una tragedia mayor y ya se ha convertido en un héroe.

Un taxista de Benalmádena (Málaga) se ha llevado un susto de muerte después de que un hombre armado haya entrado en el vehículo al grito de: "Los voy a matar, tira para allá, y voy a matar a inocentes., no me importa".

El motivo del enfado es que la grúa se había llevado su coche y quería alcanzarlos para cometer un crimen. Mientras tanto, el taxista trataba de persuadirlo para evitarlo.

"Recalco su templanza, podría haber ocurrido algo más grave"

Juanma, compañero de Ricardo

Las imágenes han sido grabadas por el conductor que había sido secuestrado y que, además, presionó el botón de emergencia avisando así del peligro que corre a los agentes.

Esto hizo que, antes de recorrer los seis kilómetros de trayecto, la policía pudiese intervenir el vehículo y reducir entre los seis al hombre cargado con las dos escopetas.

De esta manera, este taxista, que ya se ha convertido en héroe, pudo evitar un asesinato múltiple y puso fin a la carrera más peligrosa.

En 'Y ahora Sonsoles' hemos hablado con dos compañeros de este taxista, Juanma y Nicolás. Ellos también estaban en el turno de noche cuando recibieron la alarma de Ricardo, el taxista que fue asaltado.

Ellos han hablado con él y han asegurado que está tranquilo a pesar del shock. "Recalco su templanza, podría haber ocurrido algo más grave", ha dicho.

Fue a las doce de la noche cuando recibieron la alerta y en un primer momento pensaron en cómo estaba él y además les entró miedo en el cuerpo.

Los hechos comenzaron cuando se subió al coche diciendo que le podían poner una multa pero que no se llevaran su vehículo. Hubo una primera parada en la casa de la persona que lo raptó, y allí cogió las escopetas y se subió al taxi.

Ricardo pudo avisar, pero es algo que no ocurre muy a menudo, aunque sí se dan otras situaciones de riesgo. "No tenemos seguridad alguna, demandamos que las administraciones pongan sistemas de seguridad", ha explicado Juanma.