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Vemos por primera vez cómo actúa la banda que asalta las casas de futbolistas como Thomas Partey

Sergio Ramos ha sido el último en vivir la experiencia de que entraran a robar a su casa, y, aunque ni él ni Pilar Rubio estaban dentro, sí estaban sus hijos con las dos cuidadoras. Tamara Gorro nos ha contado cómo fue el asalto que ocurrió en su vivienda en 2021.

Después del atraco que sufrió en casa, Sergio Ramos ha reaparecido tranquilo y con una sonrisa, y ha asegurado que la familia se encuentra bien.

Así actúan las bandas que asaltan a futbolistas

Sergio Ramos no ha sido el único que se ha llevado un susto por parte de la banda que asalta las casas de los futbolistas. Thomas Partey, jugador del Arsenal FC, fue otra de las víctimas en 2019.

Un ladrón atravesó el jardín de su casa a gatas y, en muy pocos minutos, logró entrar y encender una linterna en busca del motín. Se le conoce como 'la banda del saltamontes' y el asaltante es su líder.

Las imágenes muestran cómo campa a sus anchas por la casa y minutos después aparece una segunda persona, que se mantenía agazapada para evitar ser vista por las cámaras de seguridad.

"Yo gritaba para asustarles, tenía terror en el cuerpo"

Tamara Gorro

Entre los dos saquearon la vivienda sin que nadie pueda impedirlo y, de un momento a otro, apareció una tercera persona con una barra metálica y minutos después sale con la caja fuerte en la mano.

Es la primera vez que vemos cómo opera esta banda de albaneses de la que también han sido víctimas otros futbolistas como Isco Alarcón o Zidane.

Cruz Morcillo ha explicado que estos asaltos se diferencian de un asalto a una casa normal en las medidas de seguridad que consiguen evitar. "Coinciden en el robo de Sergio Ramos en que no usan violencia", ha explicado.

Tamara Gorro, víctima de un asalto en su casa

Tamara Gorro ha contado que ella y Ezequiel Garay también fueron víctimas de un asalto en casa en 2021. Ellos estaban allí, pero, puesto que su casa se divide en dos, no se dieron cuenta hasta que vieron que les faltaban cosas.

Ellos decidieron contratar un guardia de seguridad porque había una oleada de robos y, en un momento que salió, los ladrones entraron a su casa. Ella escuchaba ruidos y llamó a Ezequiel para que se escondieran. "Yo gritaba para asustarles, tenía terror en el cuerpo", ha explicado.

La Guardia Civil llegó rápidamente y vieron que habían entrado a su habitación apoyándose en una pared.