Investigación
¿Es cierto que el pollo amarillo se cría de forma más natural? Desmontamos los mitos del 'pollo de corral'
La diferencia de precio en el mercado entre estos dos tipos de pollo ronda el euro y medio el kilo. Y es que los consumidores ven en el tono amarillo la idea de que se ha criado de forma más natural y alimentado con maíz. Lo hemos aclarado en Y ahora Sonsoles.
Hay muchos tipos de pollo y hasta de distintos tonos de piel. Por lo general, los consumidores asocian el color amarillo al pollo de corral, pero esa denominación no existe en la ley.
Eso sí, la diferencia de precio en el mercado entre estos dos tipos de pollo ronda el euro y medio el kilo. Y es que los consumidores ven en el tono amarillo la idea de que se ha criado de forma más natural y alimentado con maíz.
Sin embargo, el reglamento europeo especifica que debe indicarse el consumo de maíz, pero solo cuando supera el 50%.
Ignacio, profesor de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid ha explicado que los pollos se alimentan de granos de cereales y que el insignia sería el maíz, pero está a un alto precio.
Por ese motivo, en muchas ocasiones el maíz se sustituye por cebada. El profesor ha dejado claro que el color del pollo no determina cómo ha sido alimentado. "Pueden haber comido lo mismo y yo haberle introducido un pigmentante que me dé ese color", ha explicado.
Eso sí, este color amarillento se puede conseguir con un pienso solo de maíz o rico en él. Cuando no se tiene, es entonces cuando se recurre al pigmentante.
La industria, por otra parte, no solo altera el color del pollo, sino también el de las yemas de los huevos. Para comprobarlo, hemos recogido huevos de gallinas alimentadas con pienso con pigmentante y otras que no lo han tomado.
La diferencia de la yema es evidente: una tiene un color mucho más anaranjado frente a uno amarillento. Ambos huevos han salido del mismo tipo de gallina, y han comido el mismo pienso, pero las que ponen yemas más anaranjadas es porque han comido colorante.
¿Los colorantes suponen un riesgo?
Uno de los colorantes más empleados es la cantaxantina, uno de los aditivos alimentarios más usados en los piensos de las aves. Su uso para el consumo humano está prohibido, a diferencia de sus hermanos carotenoides como el betacaroteno, que se usa para acelerar el bronceado.
Más Noticias
En Y ahora Sonsoles hemos hablado con un oftalmólogo, que ha explicado abusar de este colorante puede ser perjudicial para el ojo. Por este motivo, la Unión Europea ha regulado su uso en varias ocasiones.