En plató

Pilar no consigue olvidar a su primer amor prohibido: "Si no llega a ser por su madre, estaríamos casados"

Ella trabajaba como azafata y él era el oficial de cubierta de un barco. Estuvieron saliendo en secreto durante seis años, hasta que la madre de él lo descubrió y tuvieron que separarse. Hoy Pilar ha rehecho su vida, pero es incapaz de olvidar a su primer gran amor.

Pilar y Pepino tuvieron una historia de película al estilo Titanic. Ella trabajaba como azafata de un barco, mientras él era el oficial de cubierta.

Se enamoraron perdidamente y estuvieron seis años ocultando su relación al mundo, compartiendo encuentros furtivos en cubierta o miradas cómplices en alta mar.

Aunque muchos sospechaban que eran pareja, guardaban silencio. Sin embargo, cuando la madre de Pepino les descubrió, hizo todo lo posible por separarles, consiguiendo que él se enrolara en un carguero a Canadá y, poco a poco, fueran perdiendo el contacto.

"Su madre me rechazó porque pensaba que yo era una sueca ligera de cascos", asegura. Según nos cuenta, puso a todos los oficiales del barco en su contra.

Pilar rehízo su vida, se casó y tuvo dos hijos, aunque asegura que, 50 años después, sigue recordando a Pepino. "Hace tiempo empecé a buscarlo, pero no volví a saber nada de él", confiesa.

Dicen que el amor nunca se olvida, y Pilar todos los días se acuerda del mar y de su gran amor. ¿Qué habrá sido de Pepino?