En plató

"Mis hijas sienten odio por mí": Petri trata de recuperar a la familia que le dio la espalda

Las hijas de Petri creen que su madre solo trae desgracias. Cuando sobrevivió a un cáncer y no heredaron nada, decidieron vender su casa falsificando su firma y a día de hoy no se hablan, pero ella viene dispuesta a reencontrarse con ellas.

Petri lleva 2 años sin hablar con su hija Mireia y 18 con la mayor, Jovana. Ellas dicen que Petri solo ve el lado malo de las cosas y solo trae desgracias, por lo que decidieron cortar todo tipo de relación.

Cuando a Petri le diagnosticaron un cáncer, sus hijas pensaron que moriría y heredarían pronto, pero no fue así. Por eso, cuando ella sobrevivió a la enfermedad, decidieron vender la casa de su madre falsificando su firma.

"A mis hijas las he perdonado a pesar de lo que me han hecho", confiesa Petri, asegurando que, si algún día le piden perdón, estaría dispuesta a olvidar.

Sin embargo, Petri vive con miedo y no se atreve a acercarse de nuevo a sus hijas. "Tengo miedo de los desprecios que me puedan hacer", señala.

En Y ahora Sonsoles hemos hablado con Mireia, su hija pequeña, que asegura que lo ha pasado muy mal por su madre y que no ha tratado bien a sus nietos. Esta advierte que Petri tiene problemas mentales, pero su madre lo niega, rota de dolor.

"Yo tengo la conciencia muy tranquila", añade. La guerra entre Petri y sus hijas continúa, aunque ella está dispuesta a recuperarlas. ¿Conseguirán hacer las paces en algún momento?