Hablamos con ella

Marta lleva año y medio en coma por una reacción alérgica: su madre pide ayuda para mantener el tratamiento

Esta joven estaba en el gimnasio cuando consumió un batido de proteínas que contenía este fruto seco al que es muy alérgica. A pesar de que los trabajadores le aseguraron que no tenía pistacho, ella empezó a encontrarse mal, pero en el médico la mandaron a casa tras unas horas ingresada. Esta decisión ha hecho que lleve un año y medio en coma.

Marta lleva un año y medio en coma, semiinconsciente, después de haber tomado un batido de proteínas que contenía pistacho, un fruto seco al que es altamente alérgica.

La joven no sabía que el producto contenía este alimento y acabó en la UCI. Lo consumió en el gimnasio en el que entrenaba de manera habitual, donde le dijeron que el batido no contenía pistacho, pero Marta notó que su cuerpo le fallaba.

Ingresó en el hospital pero a las pocas horas le dieron el alta. Una decisión que provocó que entrara en coma, según su madre, por una supuesta negligencia médica.

Desde ese día, María no suelta la mano de su hija e incluso han viajado a México para probar unas técnicas innovadoras a las que no tiene acceso en España. En nuestro país, considera que a Marta la están dejando morir, y por eso pide ayuda para que no le quiten el único tratamiento que puede mejorar su calidad de vida.

En Y ahora Sonsoles hemos hablado con ella y ha contado que siguen a expensas a que la Comunidad Valenciana haga algo por ellos. "No nos han dado ninguna respuesta, eso es lo que les importa lo que le ha pasado a mi hija", ha dejado claro.

Marta depende del hospital de Alcoy, pero, aunque han intentado cambiar el centro, ha sido denegado y ese centro sigue tomando decisiones sobre la vida de su hija.

"La gente está haciendo posible lo que debería hacer el sistema", ha asegurado María.

Y es que vivir con alergia se hace un mundo para muchos, ya que la vida corre riesgo sobre todo si se tienen niveles altos. Las personas que lo sufren viven con una preocupación constante, como conocimos con el caso de Águeda y su hija Lucía, alérgica a la proteína de la leche.