La guerra entre Vladimir y Rosa, dos vecinos okupas que se acusan mutuamente de amenazas y agresiones

En el barrio madrileño de Usera se encuentra 'la casa de los horrores', donde cada noche transcurre entre gritos, amenazas y golpes a causa de la guerra declarada a los okupas que viven en el bloque, que es propiedad del banco.

Algunos de los vecinos acusan a Rosa, una okupa de 62 años, de ser el capo de una mafia que quiere expulsar a los que viven allí para realquilar pisos a otros okupas.

"Ella es mala, es una bandida", ha dicho uno de los vecinos. Y es que en este edificio las amenazas de muerte son constantes, en las puertas vierten restos de orina y excrementos y las peleas están a la orden del día.

Uno de los vecinos incluso ha conseguido una orden de alejamiento de Rosa quien, asegura, no descansa. Sin embargo, viven puerta con puerta.

La tensión no se vive solo dentro del edificio, sino también en otros lugares de la zona. En Y ahora Sonsoles hemos hablado con Vladimir, uno de los okupas, que ha contado que tiene miedo de Rosa porque le amenaza e insulta, y le ha acusado de robarle. "Quiere echarnos para cobrar más", ha asegurado.

Hemos podido hablar con Rosa, que ha contado que llevan así desde hace años y que ha perdido los nervios y por eso actúa de esta manera. "Es él el que me hace de todo", ha dicho.

Además, niega que los demás okupas le hayan pagado por vivir allí. Y es que Rosa ha desmentido que ella sea la reina de la mafia y que tiene que ir a comer a un comedor social.

Sin embargo, Vladimir ha asegurado que ella tiene una pensión y que les ha cobrado por vivir ahí. Su vecina le ha dicho que él antes no era así.

Antes se llevaban bien, pero ahora no pueden convivir. Rosa ha asegurado que el motivo es que el vecino de arriba le ha comido la cabeza a Vladimir.