Hablamos con ella

Francisca, incapaz de irse a una residencia por las deudas de su hijastro: "Siempre ha sido un maleante"

Hablamos con Francisca, que no puede ingresar en una residencia como le gustaría por las deudas que ha acumulado su hijastro, que podrían llevarla a perder la casa.

Francisca está a punto de perder su casa. A sus ochenta años, se enfrenta al embargo inminente de su piso por una deuda fiscal que no es suya, sino de su hijastro. Este heredó un 5% de la vivienda que de su padre ha bastado para poner toda la propiedad en riesgo, dejando a Francisca completamente atada de pies y manos.

Propietaria del 63% de la casa desde la muerte de su marido, Francisca no puede venderla ni cumplir su deseo de ingresar en una residencia. Además, de ella dependen un hijo con incapacidad absoluta y un nieto enfermo.

"Siempre ha sido un maleante", asegura Francisco, "nuca ha trabajado y ha contraído deudas". Atrapada y sin alternativas, Francisca vive con el miedo constante de quedarse en la calle de forma inminente.