El tiempo

Roberto Brasero y los contrastes que se avecinan: "Entre vaguadas y dorsales, vaivén de temperaturas"

Este jueves se ha notado, en general, un gran contraste entre la mañana y la tarde. Pero los contrastes del tiempo que tenemos de aquí en adelante van a ser de un día con otro. El jueves, casi de verano; el viernes volvemos a marzo; y el fin de semana, también variable.

Quien haya madrugado este miércoles habrá notado cierto refresco matinal. Hacía más frío a primera hora, pero por la tarde las temperaturas serán cálidas, en general, e incluso más altas que las del martes. La excepción será a orillas del Mediterráneo, donde más altas estaban hasta esta jornada.

Se ha notado, en general, un gran contraste entre la mañana y la tarde dentro del mismo día. Pero los contrastes del tiempo que tenemos de aquí en adelante van a ser de un día con otro. El jueves, casi de verano; el viernes volvemos a marzo; y el fin de semana, también variable.

Jueves con más calor

Este jueves subirán las temperaturas desde primera hora. El amanecer nos parecerá de otras fechas y, de hecho, no sería de extrañar que en mayo o junio haya días con unas temperaturas más bajas que las del jueves por la mañana. Luego, por la tarde, seguirán subiendo en el norte y centro de la península. En el extremo occidental de la península apenas cambiarán y en costas de Huelva, Cataluña y norte de la comunidad Valenciana bajarán.

El sol reinará en toda España salvo en Galicia, donde podría llover, sobre todo por la tarde. Pero, de momento, solo ahí. Y es que el jueves, fácilmente podría ser una tarde de principios de junio.

Viernes con lluvias

El viernes sí que habrá que salir con el paraguas en más zonas de España. Es posible que ese frente que llega el día anterior a Galicia avance un poco más para dejar también algunas lluvias en el oeste de Castilla y León y el norte de Extremadura, así como chaparrones en el resto del oeste peninsular y algunas comunidades del Cantábrico. No se descartan del todo las lluvias en Navarra, La Rioja y Comunidad de Madrid, pero sería poca cosa y solo en algún momento puntual del día.

"Las temperaturas bajarán hasta 10 grados"

En cambio, no se espera lluvia en las regiones del Mediterráneo ni en Canarias. Lo más destacable será el descenso generalizado de las temperaturas con hasta 10ºC menos que el día anterior, salvo en el este peninsular y las islas, donde van a cambiar muy poquito. El viernes, en cuanto al tiempo, volvemos a marzo.

Un sábado variable

El sábado aún puede empezar con lluvias en la Galicia, Asturias y Castilla y León y a partir de media mañana en Cantabria y País Vasco. No se puede descartar que, sobre todo por la mañana, caiga algún chaparrón en el resto de la mitad norte, zona centro e incluso en la comunidad valenciana, pero deberían ser débiles, cortos, de escasa entidad. Un pasajero chaparrón primaveral que no dure mucho porque al final de la tarde del sábado ya deberían quedar muy poquitas nubes en toda España. Las temperaturas aun pueden bajar algo más. Sábado fresquete.

Sol para el Día del Padre

"Las temperaturas del domingo casi podrían ser las de un cálido día de finales de abril"

Y para el domingo el sol se apunta a felicitar a todos los padres, a los José y a las María José con un sol radiante en toda España, salvo algunas nubes bajas que aún se podrán ver por el noroeste peninsular. De todas formas, por la tarde se esperan algunas nubes de evolución en las sierras del interior. Elemento también muy primaveral.

Sin lluvias en la 'cremá' de las Fallas y con temperaturas en el este sin cambios y en ascenso otra vez en el resto de España. De nuevo habrá que tirar de manga corta. Las temperaturas del domingo casi podrían ser las de un cálido día de finales de abril.

La vaguada atlántica

Estos cambios son normales para estas fechas del año en la que el hemisferio norte -la parte de la Tierra en la que está España- empieza a recibir más energía del Sol, lo que supone una inyección de energía en el sistema climático. Y no es lo único que ocurre. Ahora estamos en el juego de las altas y bajas presiones, borrascas y anticiclones o, si se prefiere, vaguadas y dorsales.

Una vaguada atlántica no es más que una borrasca que no llega a cerrarse del todo -dicho un poco básicamente-, y en los mapas sinópticos las isobaras se dibuja como una V. Es un valle de bajas presiones. La consecuencia es parecida a la de una borrasca: con las vaguadas atlánticas vienen lluvias por el oeste peninsular y temperaturas más frescas.

Lo contrario a la vaguada es la dorsal, que es cuando el tiempo viene dominado por las altas presiones que se extienden en cuña. En el mapa es como una cresta o un tupé de altas presiones. Y con la dorsal tenemos sol y temperaturas más altas, como se ha podido comprobar durante el pasado fin de semana.

Ese baile entre dorsales y vaguadas es el que nos mantiene entretenidos con la ropa, saliendo en tirantes un día y volviendo al siguiente a la manga larga. Eso es lo que nos viene por delante, pero, aunque bajen, no serán ya demasiado frías las temperaturas. Y es que estamos a punto de despedir -ya sí del todo- al invierno: este lunes día 20 comienza la primavera astronómica.