Un bote histórico

Las primeras palabras de Rafa tras llevarse el bote de 'Pasapalabra': "Todavía no me lo creo"

El ganador del mayor premio de la historia del programa ha contado cómo ha vivido uno de los momentos más especiales de su vida.

El increíble duelo entre Rafa y Orestes ha llegado a su fin con el sevillano como merecido campeón. Tras completar su rosco entero en una sola jugada, el concursante que menos tiempo llevaba ha conseguido hacerse con 2.272.000 euros, el mayor premio de la historia de ‘Pasapalabra’.

Casi 200 intentos le han hecho falta para concluir una rivalidad que quedará en la memoria de los espectadores para siempre. Él y el burgalés han demostrado cada tarde ser dos dignos aspirantes a un bote que no ha hecho más que crecer con ellos como testigos.

Rafa asegura que está satisfecho, pero que todavía no lo ha asimilado. “Estoy algo perplejo”, ha asegurado. Además, ha afirmado que cuando se superó el bote histórico lo vieron un poco más cerca y llevaron a cabo una preparación aún mayor.

Sobre el rosco, el ganador ha contado que, curiosamente, solo dudó en la ‘Z’. Las “medianamente normales” estaba seguro de que las tenía, pero en la última letra tuvo una “dudilla” que le obligó a arriesgar.

“No quiero dejar de ser quien soy”

Rafa Castaño

Todavía no sabe qué va a hacer con el dinero, pero lo que sí que tiene claro es que no quiere que los 2.272.000 euros le cambien. Tal y como dice, ve esto como una oportunidad para “tomarse la vida con más tranquilidad”.

El momento de la llamada con sus padres ha sido uno de los más bonitos que se han vivido en ‘Pasapalabra’. Después de haberse coronado como el ganador del mayor bote de la historia, el programa concretó una emotiva llamada conmovió a todos los presentes.

Su rivalidad con Orestes

Orestes aseguró sentirse el padre de este bote, sin embargo, ha sido Rafa el que ha terminado haciéndose con él.

Pese a ello, el ganador ha asegurado que la deportividad del burgalés fue máxima y que fue el primero en darle la enhorabuena y decirle que se lo merecía. No es para menos, hasta Rafa afirma que han vivido muy buenos momentos, que es “el mejor rival que podía haber tenido”. “Espero que vuelva”, ha concluido”.

Pasará mucho tiempo para que volvamos a ver un bote de tales dimensiones y, sobre todo, para repetir una rivalidad tan histórica y bonita. ¡Hasta siempre, amigos!